El Ayuntamiento de Puebla y el DIF municipal llevaron apoyos alimentarios a familias vulnerables del sur de la capital. El presidente municipal, Pepe Chedraui, con el programa Alimentación Imparable, busca garantizar seguridad alimentaria y cerrar el año con mejores condiciones para quienes más lo necesitan.
Con el objetivo de garantizar el acceso a una alimentación digna para los sectores más vulnerables, el Ayuntamiento de Puebla y el Sistema Municipal DIF fortalecieron la entrega de despensas del programa “Alimentación Imparable” en la zona sur de la capital. La jornada se llevó a cabo en la Laguna de Chapulco, donde decenas de familias recibieron apoyos básicos para enfrentar el cierre de año.
Durante la actividad, el presidente municipal Pepe Chedraui destacó que estas acciones forman parte de una política social orientada a reducir rezagos y mejorar la calidad de vida de niñas y niños, personas con discapacidad y adultos mayores. Subrayó que el trabajo coordinado del SMDIF permite atender una de las necesidades más sensibles en la ciudad: la seguridad alimentaria.
El edil resaltó que el programa responde a una visión de gobierno que prioriza a las personas, alineada con los principios de bienestar impulsados desde el ámbito federal y estatal. En ese contexto, refrendó el compromiso de su administración para mantener cercanía con las colonias del sur de la ciudad, donde persisten mayores condiciones de vulnerabilidad.
Por su parte, la presidenta del Patronato del SMDIF, MariElise Budib, señaló que cada despensa entregada representa un esfuerzo por garantizar tranquilidad y bienestar a las familias poblanas. Afirmó que la alimentación adecuada es una base indispensable para que niñas y niños crezcan sanos, y para que los hogares cuenten con mejores condiciones de salud.
En tanto, el secretario General de Gobierno, Franco Rodríguez, reconoció el impacto social del programa y sostuvo que este tipo de apoyos contribuyen a reducir rezagos históricos. Con estas acciones, el Gobierno de la Ciudad reafirma su compromiso de avanzar hacia una capital más incluyente, donde la alimentación digna sea un derecho y no un privilegio.
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