El Pentágono revisó su lista de clientes y armas, clasificando a varias naciones en una nueva categoría de restricciones sin revelar detalles específicos.
Esta medida responde a una orden de Trump para alinear las exportaciones militares con la diplomacia estadounidense, buscando preservar la capacidad operativa de su ejército. Aunque la atención se centró en la ayuda congelada a Ucrania en marzo, la revisión también afecta a otros países, confirmaron funcionarios del Pentágono.
Expertos señalan que esta reducción en las ventas podría impactar la influencia militar de EE.UU. en regiones clave, donde antes se mantenía una fuerte presencia a través de apoyo armado. Desde 2022, Washington ha enviado miles de millones en armamento a Kiev y firmó un acuerdo para acceder a recursos minerales ucranianos a cambio de continuar el apoyo militar.
El presidente ruso, Vladimir Putin, y el presidente de EE.UU. UU., Donald Trump, han programado una nueva conversación telefónica para este jueves. Trump busca mediar entre Kiev y Moscú desde su regreso a la Casa Blanca en enero.
Putin confirmó la llamada durante una visita a una exposición. Trump reafirmó la conservación con su homólogo ruso en su red social, Truth Social.
El presidente ruso comentó que las propuestas de paz de Rusia y Ucrania son “absolutamente contradictorias”. Sin embargo, agregó que ambas partes están discutiendo una próxima ronda de conversaciones.
Putin también señaló que las relaciones entre Rusia y EE.UU. UU. Están empezando a estabilizarse. Atribuyó esta mejora a los esfuerzos de Trump.
Además, se espera que Trump hable con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en las próximas horas. Esta nueva ronda de contactos surge tras el anuncio de EE.UU. Sobre la pausa en el envío de ciertas armas a Ucrania.
Este movimiento ha generado dudas en Kiev, pero Moscú lo ha aplaudido, sugiriendo que podría favorecer la paz. Hasta ahora, el impulso diplomático de Trump ha resultado en dos rondas de reuniones directas entre Rusia y Ucrania, aunque Putin aún no acepta el alto el fuego que Trump solicita.
Estados Unidos suspendió el envío de misiles Patriot, proyectiles de artillería y municiones de precisión a Ucrania debido a que sus propias reservas alcanzaron mínimos históricos, reveló Politico. Las armas disponibles podrían redirigirse a Israel, lo que indirectamente beneficia a Rusia en el conflicto con Kiev.
La decisión fue tomada tras una revisión interna encabezada por el jefe de política del Pentágono, Elbridge Colby, quien alertó sobre la caída en la disponibilidad de misiles aire-aire, Hellfire, GMLRS y proyectiles de 155 mm, claves en el frente ucraniano. La medida contrasta con la reciente declaración de Donald Trump, quien aseguró estar dispuesto a enviar más misiles a Kiev.
Las proyecciones de producción también fallaron. Aunque el Pentágono prometió alcanzar 100 mil proyectiles de 155 mm al mes para finales de 2024, actualmente solo produce 40 mil. El retraso en la planta de General Dynamics en Texas, donde aún no operan por completo las tres líneas de fabricación, ha paralizado el aumento de producción.
Además, la falta de trabajadores capacitados obligó a importar mano de obra extranjera, principalmente turca, para operar maquinaria especializada. La empresa Repkon, con sede en Estambul, es una de las responsables de ensamblar los sistemas de producción en territorio estadounidense.
Mientras tanto, Rusia produce hasta 350 mil proyectiles al mes. La brecha industrial, la dependencia de mano de obra extranjera y los incumplimientos de contrato en EE.UU. ponen en jaque la capacidad de Washington para mantener el flujo de armamento a Ucrania en medio de un conflicto que sigue escalando.
Mario Alberto Lover Martínez, exagente de la Policía Federal originario de Ciudad Ixtepec, Oaxaca, murió el pasado 9 de junio en Ucrania tras un ataque con drones explosivos. Luchaba como voluntario en la Legión Internacional de Defensa Territorial en medio de la guerra contra Rusia.
Tras el cierre de la Policía Federal en 2019, Lover migró a Estados Unidos, se entrenó y se incorporó a las filas ucranianas. Durante ocho meses combatió en el frente. El día de su muerte, se comunicó por videollamada con su madre y hermanas. Desde entonces, no volvieron a saber de él.
Hoy su familia enfrenta trámites que impiden la repatriación del cuerpo. La Secretaría de Relaciones Exteriores informó que aún no cuenta con los permisos necesarios para su traslado. Mientras tanto, en Oaxaca lo esperan para despedirlo con un funeral tradicional zapoteca.
“Solo quiero que me lo traigan como esté”, implora su madre, Amalia Lover.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) aprobó esta semana el mayor incremento de gasto militar en su historia: cada país deberá destinar hasta el 5% de su Producto Interno Bruto (PIB) a defensa. El acuerdo —impulsado por la presión estadounidense y el conflicto en Ucrania— busca hacer frente al avance estratégico de Rusia y, sobre todo, al ascenso militar de China.
Aunque la alianza atlántica sigue liderando el gasto global con el 55% del total, su dominio ha caído 20 puntos desde el fin de la Guerra Fría. En 1990, controlaba el 75% del presupuesto militar del mundo. Hoy, China representa el 12% del gasto global (seis veces más que hace tres décadas) y Rusia ha doblado su participación, alcanzando el 5.7%.
En palabras del nuevo secretario general de la OTAN, Mark Rutte, se trata de construir una organización “más fuerte, más justa y más letal”. El anuncio también busca calmar las tensiones con Estados Unidos, donde Donald Trump ha amenazado con retirarse de la Alianza si no se equilibra el gasto.
El nuevo reparto del poder militar
Estados Unidos sigue siendo la potencia militar dominante con el 36% del gasto mundial. Le siguen China (12%), Rusia (5.7%) e India (3.1%). Ucrania, actualmente en guerra, destina el 37% de su PIB a defensa, el porcentaje más alto a nivel global.
Entre los socios europeos, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia deberán duplicar sus presupuestos militares si quieren alcanzar el nuevo objetivo. España tendría que triplicar el suyo, pasando de 20,000 a 65,000 millones de euros en una década, algo que el Gobierno de Pedro Sánchez considera poco viable.
Países del este de Europa como Polonia, Estonia o Letonia ya están por encima del 3% del PIB y se preparan para el salto. En contraste, España, Bélgica y Luxemburgo ni siquiera alcanzan el compromiso actual del 2% pactado en 2014 tras la anexión de Crimea.
El acuerdo será revisado en 2029. Si todos los miembros cumplen con el nuevo compromiso, la OTAN podría volver a concentrar hasta el 69 % del gasto militar global. Sin embargo, este escenario parte del supuesto de que China, Rusia y otros países no aumenten sus propios presupuestos, algo improbable en el actual contexto.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, reveló que conversó con el presidente ruso, Vladímir Putin, sobre la situación en Irán y Ucrania. Durante su charla, Putin ofreció su ayuda para abordar el conflicto con Irán. Sin embargo, Trump dejó claro que su prioridad es la cooperación de Moscú para poner fin a la guerra en Ucrania.
“Vladímir me llamó y me preguntó: ‘¿Puedo ayudarte con Irán?’. Le respondí: ‘No, no necesito ayuda con Irán, necesito ayuda contigo’”, afirmó Trump a periodistas a bordo del Air Force One. Este viaje lo llevó a La Haya para participar en la cumbre de la OTAN.
Trump ha abogado consistentemente por un cese de las hostilidades en Ucrania. Busca un entendimiento entre Moscú y Kiev, aunque su enfoque ha sido más crítico hacia Ucrania. Es importante recordar que Rusia inició la invasión en febrero de 2022.
La semana pasada, Putin destacó que el conflicto en Ucrania es diferente al de Israel e Irán. En este último, Trump ayudó a negociar un cese al fuego entre el Gobierno israelí y Teherán tras 12 días de combates.
En un foro económico en San Petersburgo, Putin aseguró: “No buscamos la capitulación de Ucrania, sino el reconocimiento de la realidad creada sobre el terreno”.
Por su parte, el Kremlin, aliado de Irán, expresó su apoyo a un alto el fuego entre Irán e Israel. Dmitri Peskov, portavoz presidencial, comentó: “Esto es lo que pedía Rusia desde el comienzo del conflicto. Solo podemos saludarlo”.
La tensión entre las potencias y los conflictos en curso continúan destacando la complejidad de la situación global. La atención se centra en cómo se desarrollarán las relaciones entre EE.UU. y Rusia en este contexto.
Este lunes, inició la reunión del G7 en Canadá, donde se reúnen los mandatarios de las economías más poderosas del mundo. La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tiene programadas importantes reuniones con líderes internacionales, incluyendo al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y al primer ministro canadiense, Mark Carney.
La cumbre se desarrolla en un contexto de tensiones internacionales provocadas por conflictos bélicos y comerciales. Brasil, México y Ucrania asisten como invitados, junto con representantes de la Unión Europea.
Sheinbaum se reunirá el martes con Trump, Carney, el primer ministro de India, Narendra Modi, y líderes de la Comisión Europea. Este lunes, sostendrá una reunión con el sector privado canadiense para discutir posibles inversiones en México y fortalecer la colaboración entre los sectores público y privado.
Aunque la agenda de Trump no descarta un encuentro con Sheinbaum hoy, diversas fuentes indican que la cita formal se llevará a cabo el martes. La reunión con el Consejo Empresarial de Canadá, encabezado por Goldy Hyder, se espera alrededor de las 4 o 5 pm (hora local).
Los temas clave que se abordarán con Trump incluyen la relación comercial en el contexto del T-MEC, los aranceles, la migración y la seguridad, especialmente en relación al narcotráfico y el fentanilo.
Por su parte, la reunión con Carney se centrará en cómo fortalecer y mantener el T-MEC, así como en explorar nuevas oportunidades de inversión y cooperación económica entre México y Canadá. La defensa conjunta del comercio binacional frente a las políticas arancelarias de Trump también figurará en la agenda.
El G7 está compuesto por Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos. La cumbre representa una oportunidad crucial para abordar los desafíos globales y fortalecer alianzas estratégicas.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este lunes que tras una llamada telefónica de más de dos horas con su homólogo ruso, Vladimir Putin, ambas partes acordaron iniciar de inmediato negociaciones para alcanzar un alto al fuego y, eventualmente, el fin de la guerra en Ucrania.
“Creo que fue muy bien. Rusia y Ucrania iniciarán de inmediato negociaciones para un alto el fuego y, aún más importante, el fin de la guerra”, declaró Trump en un comunicado público emitido desde su oficina en la Casa Blanca.
Trump señaló que la llamada con Putin se desarrolló en un “tono y espíritu excelentes”, y destacó que cualquier acuerdo de paz deberá ser negociado directamente entre Kiev y Moscú, al ser ellos “quienes conocen los detalles que nadie más sabría”.
Primera reacción de Donald Trump a su llamada de más de dos horas con Vladimir Putin:
"Acabo de terminar mi llamada de dos horas con el presidente ruso, Vladimir Putin. Creo que fue muy bien. Rusia y Ucrania iniciarán de inmediato negociaciones para un alto el fuego y, aún más… https://t.co/yWPzuQylfI
El mandatario estadounidense aseguró que informó del resultado de la llamada a líderes europeos y al Papa Francisco, mencionando específicamente a Volodymyr Zelenskyy, Ursula von der Leyen, Emmanuel Macron, Giorgia Meloni, Friedrich Merz y Alexander Stubb, con quienes sostuvo una conversación adicional inmediatamente después de su diálogo con el presidente ruso.
De acuerdo con Trump, el Vaticano se mostró interesado en fungir como sede neutral para las conversaciones de paz, lo que abriría la posibilidad de un proceso diplomático con respaldo multilateral.
El presidente también anticipó un escenario de reconstrucción económica postbélica, subrayando que tanto Rusia como Ucrania podrían beneficiarse de un eventual tratado comercial con Estados Unidos. “Rusia tiene una enorme oportunidad de crear empleo y riqueza. Ucrania también puede beneficiarse enormemente del comercio en su proceso de reconstrucción”, dijo.
Hasta el momento, ni el Kremlin ni el gobierno de Ucrania han emitido declaraciones oficiales confirmando el inicio de negociaciones, aunque medios rusos han replicado el mensaje de Trump con cobertura destacada.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, pidió a Ucrania que acepte “de inmediato” la propuesta de Vladimir Putin para reunirse en Turquía. Esta reunión está programada para el 15 de mayo en Estambul.
Trump hizo su solicitud a través de su red social, Truth Social. Afirmó que Rusia no busca un acuerdo de alto el fuego, sino una oportunidad para negociar el fin del conflicto.
El mandatario argumentó que Ucrania debería aceptar la oferta para determinar si un acuerdo es posible. Además, mencionó que esto permitiría a los líderes europeos y a EE.UU. entender mejor la situación.
Trump cuestionó la disposición de Ucrania para negociar, afirmando que el presidente Zelenski está demasiado enfocado en conmemorar la victoria de la II Guerra Mundial. Con su estilo característico, concluyó sus comentarios con la frase “REUNIÓN ¡¡¡YA!!!”.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, calificó la propuesta de Putin como un “primer paso” hacia la paz. Sin embargo, insistió en que debe haber un alto el fuego antes de sentarse a negociar.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró que Putin busca resolver el conflicto por medios pacíficos. Sin embargo, advirtió que si no hay opciones diplomáticas, la operación militar continuará.
El Papa León XIV hizo un llamado urgente por la paz en su primer discurso dominical desde la Plaza de San Pedro. “Que cese de inmediato el fuego en la Franja de Gaza, que se permita la ayuda humanitaria y se liberen todos los rehenes”, expresó.
📹 #Vídeo | “Que cese de inmediato el fuego en la Franja de Gaza, que se permita la ayuda humanitaria y se liberen todos los rehenes”, expresó el Papa León XIV desde la Plaza de San Pedro. Celebró el acuerdo de paz entre India y Pakistán.
Durante su alocución, el pontífice también reflexionó sobre la guerra en Ucrania. Pidió una “paz duradera” y destacó su dolor por el sufrimiento del pueblo ucraniano. “Llevo en mi corazón el sufrimiento del querido pueblo ucraniano”, afirmó.
El Papa celebró el acuerdo de alto al fuego entre India y Pakistán, que se alcanzó el sábado. “Me alegra escuchar que hubo un alto al fuego entre India y Pakistán. Espero que se logre un acuerdo duradero”, dijo.
León XIV fue elegido líder de la Iglesia Católica el jueves, tras un cónclave de dos días. En su discurso, recordó la tragedia de la Segunda Guerra Mundial y advirtió sobre el riesgo de una tercera guerra mundial en fragmentos.
Su mensaje llegó en un momento crítico, mientras Ucrania y Rusia presentan planes opuestos para la paz. En Gaza, Israel ha bloqueado la ayuda humanitaria y reanudó su ofensiva militar tras el colapso de un alto al fuego.
El Papa hizo un llamado a las potencias mundiales, repitiendo: “Nunca más guerra”. Su mensaje resuena en un mundo que enfrenta múltiples conflictos y busca soluciones.