Etiqueta: Luis Tovar

  • El “locus communis” del periodismo mexicano

    El “locus communis” del periodismo mexicano

    Ira, rabia, rencor, frustración, envidia e incluso cierta nostalgia se mezclan hasta encarnarse en un periodista —o una periodista— que, haciendo uso de un micrófono, una pantalla o una pluma editorial, no tiene otro objetivo más que descarrilar el proceso de transformación que vive el país. Esa carne, ese cuerpo programado por los más desprestigiados comunicadores del viejo sistema, posee unas cuantas lenguas de las que emanan voces violentas que anhelan regresar al pasado del periodismo con incidencia política: aquel de la manipulación masiva y, en algunos casos, de la extorsión como modelo de negocio.

    Si bien quedaron atrás los efectos de la tiranía comunicacional, lo cierto es que, en su resistencia a fenecer, los medios más desprestigiados —y sus antiguos dueños— no han tenido más remedio que recurrir a nuevas y costosas campañas de odio contra el anterior y el actual gobierno mexicano, disfrazándolas de reportajes o de periodismo de investigación. ¿Quiénes están detrás? ¿Quiénes son las voces? Poco valdría la pena señalar a Televisa, TV Azteca, Reforma, Latinus, Código Magenta entre otros; como poco valdría la pena mencionar a sus voceros, pues se encuentran plenamente identificados por la audiencia.

    Lo que sí vale la pena señalar es la manera en que este periodismo no es en lo absoluto fiel a los principios de las ciencias de la comunicación. En nada, absolutamente en nada, transmite los fenómenos comunicativos con eficacia ni con ética. Se reduce, más bien, a la mentira, la calumnia y la descalificación de un proyecto, con el interés de retornar al modelo que les significó los más escandalosos y millonarios privilegios.

    Muestras fehacientes de estas campañas publicitarias violentas y mentirosas —sin precedente alguno en nuestro país—, que incluso hacen ver aquella campaña de 2006 “AMLO: un peligro para México” como un juego de niños, son las recientes publicaciones de Código Magenta acerca de la supuesta corrupción en el gobierno de la Cuarta Transformación. Publicaciones como “La Pandylla de PEMEX” dejan en evidencia el uso reiterado de un locus communis como discurso político-mediático carente de fuentes verificables. Los ejemplos sobran: afirmaciones sin evidencia clara, lenguaje acusatorio, falta de transparencia metodológica, alusión a “audios” sin revelarlos, uso de apodos y metáforas, y una narrativa sensacionalista de carácter político orientada a influir en la percepción pública, lejos de un reportaje que informe con rigurosidad y sustento empírico.

    “Corrupción estructural del gobierno”, “PEMEX como símbolo de saqueo nacional”, “el héroe que revela la verdad oculta”, “el enemigo interno”, “el Andy”, “el Gallo”… todos ellos lugares comunes, todos loci communes empleados una y otra vez para sustituir, con vulgaridad, la investigación periodística por un efecto de verdad moralizante sin razonamiento crítico alguno, contrario a los principios del periodismo como herramienta para informar a la sociedad y construir un debate público informado.

    No pretendo en estas líneas señalar si existe o no corrupción; este fenómeno social persiste a pesar de los esfuerzos por combatirlo, y su largo brazo ha alcanzado incluso a quienes considerábamos probos. Sin embargo, no se puede negar —y eso está comprobado— que el gobierno de Claudia Sheinbaum combate el fenómeno de manera frontal, sea quien sea el implicado.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • Bloque negro: el verdadero objetivo

    Bloque negro: el verdadero objetivo

    Si la memoria no me falla, sería más o menos por el año de 1992 cuando asistí por primera vez a una marcha para conmemorar el 2 de octubre. En aquella ocasión, siendo estudiante de secundaria, me acerqué al contingente de la UNAM con la idea de encontrarme con alguien del STUNAM con quienes me sentía identificado porque mi mamá y algunos de mis tíos trabajaban ahí. Nunca había asistido a una marcha de esa naturaleza, es más, no había asistido a ninguna, por lo tanto, mi asombro al ver tanta gente no era menor. Recuerdo que ese día regresando a casa, experimenté la necesidad de saber más acerca de lo que había ocurrido en 1968.

    Dos años después, ya como estudiante de la prepa 9 de la UNAM y con más conciencia de lo que había representado el movimiento para la historia reciente de nuestro país, asistir a la marcha me era obligado; conmemorar con una movilización al movimiento estudiantil del 68 significaba mantener fresca nuestra memoria colectiva sí, pero también se convertía en una especie de tributo y agradecimiento a aquellos estudiantes, pues gracias a ese movimiento, mi generación había tenido la posibilidad de vivir nuevos procesos democráticos y nuevas formas de acceder a la participación política. Nosotros, mi generación, somos eso: herederos de un movimiento que representó un hito en la historia mexicana. Desde 1992 a la fecha, no he cambiado mi manera de pensar al respecto, año con año marcho el 2 de octubre, antes lo hacía con la banda, hoy con la banda y con mi familia pues mi familia siempre me acompaña.

    Si bien para algunas personas como yo, la marcha es una conmemoración y un tributo como ya lo expresé, para un pequeño bloque de grandes intereses se ha convertido en el escenario perfecto para restarle legitimidad a la movilización social, no sólo la referente a temas como el movimiento estudiantil, ya sea el 68, el halconazo o Ayotzinapa; también alcanza otros movimientos como el rechazo al genocidio de Israel el Gaza. Este bloque violento, estúpido e irracional no es producto de la casualidad, mucho menos de la efervescencia o fruto de la rabia contra el sistema; se trata de un grupo equipado, auspiciado y coordinado por fuerzas poderosas que detestan la movilización social y que saben a la perfección que, al restarle legitimidad y reducirla, tendrán un excelente campo de acción para sus propios intereses. Hoy toman el 2 de octubre, nadie dudaría que comiencen a hacerse partícipes en otros movimientos como el campesino, las madres buscadoras, el ambientalista, etc.

    No hay otra explicación, el verdadero objetivo es ese: generar violencia e irla incrementando cada que haya una movilización, ¿para qué? Para que las verdaderas y legítimas causas queden en el desprestigio y para que la gente opte (por más identificado que se sienta con esa causa) por no asistir. Pero, contrario a lo que desean esos grupos de interés y sus marionetas vestidos de negro, eso no pasará jamás en nuestra capital porque es (desde siempre) el corazón de la reivindicación social de todo el país.

  • Presupuesto para el campo 2026, un modesto aumento

    Presupuesto para el campo 2026, un modesto aumento

    Entiéndase modesto como sinónimo de insuficiente, sin embargo, tras años de rezago en el agro a partir de las políticas neoliberales, la realidad es que todo recurso es insuficiente cuando se vive en un modelo económico ya por demás desgastado al que sólo se puede combatir desde la construcción de políticas integrales que atiendan el problema de fondo cómo se ha intentado desde el arribo de la 4T al poder, aunque, en honor a la verdad, también ha sido insuficiente.

    Lo anterior, ya sea por la herencia del modelo neoliberal o sea por otros factores como la falta de compromiso de algunos servidores públicos, lo cierto es que las políticas públicas para el campo y su emancipación están lejos de alcanzarse, pero cuando menos, se reconoce la importancia de aumentar los recursos. Esto no quiere decir que el aumento sea una insignificancia, durante décadas, una de las principales demandas de las organizaciones campesinas se basaban en el aumento de presupuesto para el agro, capaz de cubrir con las necesidades reales del sector, aunque en honor a la verdad, muchos señalábamos que más allá de requerir mayores recursos, lo que realmente ocupaba (y ocupa actualmente el sector) es la reorientación de los recursos a manera de que éstos sean destinados de manera equitativa priorizando al pequeño productor y no privilegiando a las grandes empresas como se ha venido haciendo desde hace muchos años.

    Como quiera que sea, lo real es que, o el aumento del presupuesto o el análisis de la distribución de este, poseen la clave para materializar lo que en el papel plantea el actual gobierno, pero para que esto suceda, también se requiere de la participación activa y permanente de las organizaciones campesinas que en la actualidad mantienen un programa de lucha identificado con las necesidades de los campesinos y no con las ambiciones políticas o económicas de algún liderazgo.

    El proyecto de presupuesto de egresos para el próxima año considera un aumento de poco más de 680 millones de pesos en comparación con el del año pasado, es decir, una cifra de menos del uno por ciento, qué, como dijimos al principio, puede considerarse como insuficiente en general, pero, de manera objetiva, puede generarse una buena expectativa el hecho de que se destine mayor recurso a los programas productivos, siempre y cuando estos sean otorgados de manera transparente, sin ningún tipo de intermediario, (ninguno es ninguno y eso incluye a MORENA), y verificando que sean destinados para lo que son. 

    No obstante lo anterior, hay que hacer hincapié en un punto: No sólo hay factores internos como la inflación (entre otros) que afectan la vida del campesino, a todos estos factores se suman las consecuencias del contexto político internacional así como el cambio climático que en un país como el nuestro, provoca que las regiones oscilen entre las sequías extremas y las alarmantes inundaciones; a todo esto sumemos la pérdida identidad y de capacidad organizativa de algunos colectivos identificados con el agro y agreguemos finalmente la falta de tacto de uno que otro funcionario. Esto en suma provoca que un presupuesto “modesto” se vea aún más disminuido si al final del día, los objetivos de cualquier programa, ya sea por una razón o la otra dejan de alcanzarse. 

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.

  • EL PATÉTICO PLEITO

    EL PATÉTICO PLEITO

    No hay otra forma de describir la vergonzosa pelea entre Alito Moreno y Fernández Noroña cuyo espectáculo brindado el día de ayer, no hace más que degradar tanto la práctica política como a la propia cámara alta. Resulta por demás absurdo que en un país con retos urgentes en varios rubros, personajes como este par reduzcan el escenario político a peleas sin sentido y sin causa justificable, ambos deben ser sancionados por su conducta, uno por discurso incendiario a veces carente de contenido y el otro por la altanería que lo caracteriza, misma que no es otra cosa que una pose para tapar el largo signo de corrupción que lo acompaña de toda la vida.

    Si bien un enfrentamiento como éste no se entendería en otro espacio que no sea una cantina, lo paradójico es que se presente precisamente en un escenario cuya naturaleza exige la exposición de razones, la argumentación y el debate serio para la construcción del bien común; hoy el senado se convierte en un espacio deplorable en el que se ridiculiza el quehacer político gracias a personajes como los aquí mencionados que cómo se parecen a Lily Téllez. Por estos personajes, a los que insisto, se debe sancionar, les parece más redituable el enfrascamiento en un duelo de insultos, gesticulaciones burdas y actitudes que no sólo empobrecen el ya de por sí reducido debate político, sino que además transmiten un mensaje claro a la ciudadanía muy claro: ni uno ni otro están a la altura de las responsabilidades como servidores públicos, como representantes populares, todo lo contario, su actitud que bordea la vulgaridad, nos hace pensar que la máxima tribuna de la nación, está plagada de sujetos parásitos que llegan a partir del ya deplorable sistema de partidos. Imagínense, ¿y así Noroña pretende ser presidenciable? ¡Ni Dios lo permita!

    En fin, este circo que rebasa toda razón, es el claro reflejo de una clase política desconectada de la realidad, especialmente porque no se trata de un hecho aislado, forma parte de esa tendencia de la presente legislatura de optar por el espectáculo y la confrontación estéril por encima de elevar la discusión pública; Lily Téllez, Alito Moreno y el propio Noroña (viejo conocido en la arena del grito pelado) hoy se preocupan más por alimentar el ego como si el atraer reflectores a partir de espectáculos bochornosos le fuera de utilidad a las verdaderas necesidades del país.

    Pero más allá de eso, lo verdaderamente preocupante no radica en quien tiene la razón, mucho menos en quien sale ganando de esta show ya mediático y tendencia en redes sociales, lo preocupante es que sus acciones los dejan en ridículo de la misma magnitud con la que atentan contra la de por sí frágil confianza que tiene la ciudadanía hacia la clase política, especialmente hacia con los legisladores. Quien pierde es precisamente esa ciudadanía que no está dispuesta a asumirse de un lado o de otro en la oferta política actual que representan los partidos pues con este show denigrante, el ciudadano consciente y bien informado puede que opte por la abstención en los comicios que por interesarse en los proyectos partidistas.

    En fin, vaya caricatura de la política mexicana: gritos, ataques, jaloneos, mentadas de madre, todo junto en un senado que hoy se parece más a un foro de espectáculos baratos que al espacio serio que debe dar forma al futuro de la nación. Ojalá por decencia, ambos dejen sus escaños y ofrezcan disculpas públicas pues ninguno de los dos, sean del partido o movimiento al que pertenezcan, son dignos de llamarse representantes populares.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • La otra cara de CONAGUA

    La otra cara de CONAGUA

    Durante el sexenio de López Obrador existieron una serie de avances significativos en la política pública respecto al agua, por ejemplo, la construcción y modernización de las hectáreas de riego, las obras de infraestructura hídrica estratégica y destacaría desde una perspectiva ambientalista, la restauración ecológica a partir del saneamiento y recuperación de cuencas. Si se toma como referencia los 5 sexenios anteriores, (especialmente la gestión de Peña Nieto) se transformó radicalmente a esa dependencia anteponiendo la necesidad de reorientar la política pública para que dejara de ser servil a intereses contrarios al bienestar de la población. No obstante, las acciones impulsadas por Andrés Manuel resultaban insuficientes: un sexenio no bastaba para acabar con el signo de corrupción que definió el actuar de la CONAGUA, lo que obligaba al gobierno actual a trabajar en un plan de grandes alcances como el que puso en marcha Claudia Sheinbaum.

    El Plan Hídrico Nacional del gobierno de México debe ser considerado como verdaderamente progresista: estructura sus ejes alrededor de la soberanía, la justicia y la transparencia sin dejar de lado la adaptación al cambio climático; dichos ejes que, desde mi punto de vista, son en automático “principios” se distinguen por el enfoque humanitario que hoy requiere cualquier acción en pro del ambiente.

    Echar a andar un Plan tan ambicioso como este en un país como México donde casi el 65% del territorio sufre sequía severa, requería de una conducción de CONAGUA que combinara las capacidades técnicas con el compromiso social; es más, siendo parte activa del movimiento campesino y ambiental, me atrevería a hacer mucho más énfasis en el compromiso social, pues desde siempre hemos asentado que no puede haber justicia social si no hay justicia ambiental y eso es un valor que rebasa por mucho las consideraciones de carácter técnico. Es decir, una dependencia como CONAGUA, con un país que padece estrés hídrico, requiere que todas, absolutamente todas las consideraciones técnicas se supediten al compromiso social y no como elemento para justificar (a partir de tecnicismos) el mal uso del recurso.

    Bajo estas consideraciones, me parece que la CONAGUA se ha puesto a la vanguardia en temas de carácter ambiental, sobre todo, creo que la gestión ha sido por demás acertada desde que su titular ha hecho énfasis en una gestión integral con justicia social desde que se revisaron las concesiones para reducir los privilegios corporativos y, en consecuencia, fortalecer el acceso comunitario al vital líquido. Por esa razón, creo indispensable destacar que la creación del Registro Nacional de Agua para el Bienestar tiende por fin a que se deje de ver el agua (ya sea por funcionarios o por empresarios) como una mercancía y sea lo que es constitucionalmente: un bien público que forma parte de nuestra soberanía y seguridad nacional.

    Creo que Efraín Morales al frente de CONAGUA ha marcado un liderazgo muy claro, con una visión humana y social, especialmente a la hora de confrontar cualquier designio de corrupción en la gestión hídrica, incluso en el terreno internacional donde se ha convertido en una pieza clave frente al compromiso con Estados Unidos bajo el tratado de 1944 en el que ha diseñado una estrategia interesante que permite el cumplimiento de dicho acuerdo sin que eso signifique sacrificar a comunidades locales.

    Por esa razón, me parece fundamental que en la nueva política del agua con ese enfoque social, se impulse una visión renovada de los acueductos que hoy se convierten en verdaderos instrumentos de justicia social que llevarán el agua donde más se necesite partiendo de los derechos de las comunidades y del medio ambiente como es el caso del Acueducto Solís-León que, sin comprometer ecosistemas ni comunidades aguas arriba, llevará agua potable a 1.8 millones de personas al mismo tiempo que reducirá de manera significativa la sobre explotación del acuífero Valle de León. Estas obras se encaminan hacia el éxito gracias que se redefine una nueva relación del gobierno con el agua y con las comunidades, se prioriza el diálogo, se incentiva la participación ciudadana y se construye una relación sólida para resolver los problemas de abastecimiento, por esa razón y reconociendo la lucha en contra de la desigualdad hídrica fomentada por los gobiernos neoliberales, retomo las palabras de Efraín Morales: “Un acueducto no es sólo una tubería: es una promesa cumplida de dignidad para quienes han vivido sin agua durante generaciones.”

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • El nuevo partido que ocupa este país

    El nuevo partido que ocupa este país

    Dados los últimos acontecimientos en el espectro político, atreverse a negar que MORENA atraviesa por una crisis, sería tanto como negar que en México la oposición se encuentra al borde de la extinción, el problema es que, tanto unos como otros, se obstinan en negar la situación por la que atraviesan y la imagen negativa que permea hacia la sociedad. En el caso de MORENA, esta situación es aún más peligrosa dado el poder que ostenta a partir de la presidencia y los estados que gobierna, así como el número de legisladores que posee, pero más allá de eso, por la esperanza que ha albergado en los millones de mexicanos que aún se identifican con el movimiento.

    Pero vayamos por partes: en lo personal soy afín a dicho movimiento de toda la vida, sin embargo, jamás he abandonado una postura crítica desde mi humilde militancia, así que, fiel a la autocrítica necesaria y declarándome partícipe de la política de gobierno encabezada por Claudia Sheinbaum, considero que en la coyuntura actual y a partir de la crisis de los partidos políticos, ha llegado la hora de abrir paso a un nuevo partido.

    Sin embargo, no debe tratarse de un partido político que se convierta en automático en agencia de colocaciones de aquellos que han brincado de cargo en cargo para beneficiarse del oportunismo, tampoco debiera convertirse en un ente timorato alineado al poder bajo consideraciones pragmáticas o el cálculo político per se. Todo lo contrario, se requiere de una nueva fuerza que tenga entre su militancia, y, especialmente en su dirigencia, a mujeres y hombres comprometidos con causas en las que se anteponga el bienestar generalizado, no sólo como frase discursiva demagógica, sino como modelo de su actuar. Se requiere de un nuevo partido que tenga plena conciencia de lo que realmente anhela la sociedad tomando como referencia los aciertos y errores de la política existente y que se aleje por completo de las decimonónicas estructuras partidistas de toda la vida. Es decir, un partido que tenga capacidad de representar las demandas de la población y para trazar la ruta para su solución a partir de propuestas claras y sobre todo medibles.

    Ese nuevo proyecto puede resultar clave en las elecciones intermedias de 2027 si apuesta por dejar en claro desde sus principios, que la democracia no se reduce a las elecciones, sino que implica fortalecer la participación ciudadana a partir de reconocer el aporte indudable de todos aquellos que se organizan en colectivos para representar verdaderas causas como las que hoy han abandonado todos los partidos, incluyendo a MORENA. Si ese fortalecimiento se acompaña desde un nuevo proyecto, puede convertirse en una fuerza poderosa, no sólo en el ámbito electoral, sino como herramienta garante de la verdadera democracia que hoy, incluso, fortalecería al propio gobierno de la República. De hecho, en cualquier democracia verdadera, el que la ciudadanía se involucre de manera permanente y activa a través de presentar sus propias propuestas, no puede significar otra cosa que un buen ejercicio de gobierno y la emancipación de todas y todos los que se dedican a mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.

    Por el momento estamos lejos de esa realidad, sin menoscabo de los esfuerzos de la presidenta de la República y de valiosas compañeras y compañeros que se mantienen fieles a sus principios, ya sea en el ejercicio de gobierno, en el ámbito legislativo o, incluso partidista. En contraste con éstos, se cuentan por cientos aquellos que muestran oídos sordos a demandas justas, peor aún, existen quienes menosprecian a los que opinan diferente, e incluso los descalifican, pero, a pesar de eso, sostengo que vale la pena destacar a los primeros sí, pero también señalar a los segundos, exigirles rectitud por encima de todas las cosas.

    Por cierto, casualmente, hablando desde la sociedad civil organizada, algo llama la atención, precisamente los personajes que más pueden ser criticables en el movimiento son los mismos que utilizan el discurso en contra de quienes se organizan para transformar las realidades. A veces pareciera que se abandona la merecida crítica hacia el modelo de organización popular, para transmutarlo en desacreditación, aún y cuando se trate de compañeros que comparten dicho proyecto.

    Finalmente, me parece que un nuevo partido, (de hecho, todo indica que sólo aparecerá una nueva propuesta), le hará bien a la sociedad, especialmente a la que se organiza permanentemente, pero, si me apuran un poco, también creo que le va a ser de beneficio al propio gobierno de la República, no porque éste se vuelva comparsa en automático, sino porque existen más coincidencias que diferencias, sobre todo porque se comparte proyecto y este va más encaminado a la consolidación de los ideales. 

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • Se vienen los nuevos partidos políticos. Parte III y última

    Se vienen los nuevos partidos políticos. Parte III y última

    La presente entrega dividida en tres partes, (por fin esta es la última) no precisamente tiene como objetivo analizar el avance de las fuerzas que se registraron en el proceso del Instituto Nacional Electoral para convertirse en partidos políticos a tres semanas de la primer entrega, sino de constatar lo que aquí se ha venido señalando: el objetivo real de casi todas las expresiones, salvo honorables excepciones, lejos está de aparecer en la vida partidista en las elecciones del año 2027, más bien, aunque suene reiterativo, en la de dejar clara su verdadera presencia para acordar de qué manera podrían sumarse a las siglas que hoy existen y con las que pudieran obtener espacios de representación popular, más cobijados por estas siglas que por tener una incidencia real en la ciudadanía.

    En esas honrosas excepciones que aquí expresamos, hay verdaderos luchadores sociales que buscan trabajar desde abajo identificándose con causas que parecieran estar abandonadas, tanto por MORENA como por el bloque opositor; sin embargo, es una realidad que las condiciones no les son favorables y no puede ser más que una verdadera lástima porque estas compañeras y compañeros ofrecen una visión crítica de la situación política actual y su aparición sería de beneficio para el acontecer democrático. 

    Por otro lado, las fuerzas colectivas que hoy van a la cabeza en términos de las asambleas realizadas, muestran con claridad que sólo una terminará convirtiéndose en partido político, como es el caso de CSP, mientras que, el segundo lugar, con 27 asambleas de diferencia, matemáticamente ve alejada la posibilidad de llegar a la meta, situación extraña porque los actores de esa fuerza vienen pregonando una representación que parte más de la narrativa opositora que de su verdadera incidencia en la sociedad. Luego entonces, si tanta gente (como dicen) está en contra de MORENA, ¿cómo explican el desdén de la ciudadanía hacia su proyecto o de qué manera explican el gran número de asambleas canceladas? La única respuesta a mi parecer es que permea más el alto nivel de aprobación hacia Sheinbaum que el descontento de aquellos que la reprueban más allá de las redes sociales.

    Revisando el último informe del INE actualizado al 15 de julio 2025, se constata que CSP lleva un total de 120 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 82, es decir, 38 han sido declaradas nulas por falta de quórum, aunque es preciso señalar que este dato, el de las “cancelaciones” no es así realmente, muchas de ellas fueron reprogramadas por CSP con anticipación, luego entonces, no quedan en sí canceladas por falta de quórum como asienta la publicación del INE. Personas Sumando en 2025, A. C. lleva un total de 106 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 55, es decir, 51 han sido declaradas nulas por falta de quórum y, finalmente, Que Siga la Democracia, APN. lleva un total de 16 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 11, es decir, 5 han sido declaradas nulas por falta de quórum. Si tomamos en cuenta el número de semanas que faltan para culminar el proceso y faltando, cuando menos a quien va en segundo lugar, casi 150 asambleas por celebrar, pues por donde se vea está muy cuesta arriba.

    Pero aquí entra un dato importante que analizar si ponderamos desde ahora la posibilidad de que se apruebe la reforma electoral, es decir, los alcances de la reforma están trazados ya pero en ellos se visualiza la posibilidad de que en esta nueva etapa, un partido pueda coaligarse desde inicio a una fuerza existente, si eso llegara a presentarse, entonces estaríamos ante un escenario distinto que dará mucho de qué hablar pues cambiaría las reglas del juego y esto no podría ser más que una señal de preocupación para quienes utilizan este proceso de creación de nuevos partidos, sólo como moneda de cambio.

    En ese mismo sentido, hay que recalcar entonces qué puede llegar a pasar con CSP para 2027 y, sobre todo para 2030, pues ir en coalición, siendo un aliado conocido del morenismo, estaría en posibilidades de alcanzar espacios de representación importantes que darían un viraje hacia la consolidación de una presencia territorial. Si a eso sumamos que el panorama dentro del morenismo se ve ya complejo en la carrera por la sucesión, en una de esas les aparece una nueva propuesta en el 2030. Yo no perdería de vista por ejemplo a Hugo Érik Flores.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • Se vienen los nuevos partidos políticos. Parte II

    Se vienen los nuevos partidos políticos. Parte II

    La semana pasada mencionamos la situación de las agrupaciones que buscan convertirse en partido político para el siguiente año una vez que concluyan los plazos que estipula la autoridad electoral y de las posibilidades reales que tienen algunas de estas para alcanzar el objetivo. Una semana después, verificando el número de asambleas celebradas, queda claro que sólo una de ellas avanza con constancia como es el caso de Construyendo Sociedades de Paz, asociación que celebró cuatro asambleas más el pasado fin de semana en la Ciudad de México, Zacatecas, Campeche y Michoacán.

    El número de intenciones de asambleas, así como las canceladas que han sido intentadas por otras organizaciones, pareciera ser el reflejo de lo que buscan en realidad estos grupos que no es precisamente el de llegar a convertirse en partidos políticos que ofrezcan una alternativa para ese grueso de la ciudadanía que no se ve representada ni por MORENA como grupo principal, ni con la desdibujada oposición.

    Todo indica que, en el fondo, de lo que se trata es de mostrar músculo que les permita acordar de manera decorosa, ya sea con un bando o con otro a manera de ocupar espacios importantes que les de vida en la participación político electoral y no de cara hacia el electorado que requiere de nuevas fuerzas plurales identificadas con causas. Esto por donde se mire es sumamente lamentable porque otra vez, ya sea de un lado o de otro, lo que les importa es el bienestar de grupo y no los intereses de los demás. Es decir, ¿Dónde quedan para estas organizaciones las necesidades del sector no representado actualmente? ¿Qué valor otorgan a las causas de esos sectores que siguen sin ver logros significativos en sus demandas justas como por ejemplo el campo mexicano? Exactamente en ningún lado, vuelven a ser ignorados porque no es la causa lo que se antepone sino la necesidad de sobrevivir políticamente, aunque en eso se vaya la pérdida de identidad y algunos casos de congruencia ideológica.

    Al igual que en la entrega pasada, en este espacio sostenemos que no se trata de mencionar las particularidades de cada organización aspirante, sino de cómo los percibe la ciudadanía pues no se logra comprender cómo, a tan poco tiempo de acabar con el proceso de construcción, no se vuelcan a las calles para tratar de sumar adeptos que se convenzan de la importancia de tener una nueva alternativa más fresca y, sobre todo, más interesada en tener un proyecto que retome los grandes pendientes en este país hasta hacerlos propios y luchar por ellos. Parece que resulta más cómodo alardear en las redes sociales que construir esas redes sociales desde abajo como debiera de ser.

    Hace no mucho tiempo, un viejo dirigente muy avivado de los que hoy busca crear un partido señalaba que debiera existir una opción diferente en términos partidistas que represente a los cuarenta millones de mexicanos que no salieron a votar. La narrativa llama la atención, dicho dirigente prefiere hablar de los que no votaron, desdeñando a los que sí votaron y, sobre todo, a favor y en contra de qué votaron, pareciera que se niegan a expresar que los que si votaron, dieron la espalda a un sistema de partidos que llevó a este país al traste. Pero digamos que tiene cierta razón, pues tan importante son los que votan como los que no lo hacen, pero si ese es el caso, la pregunta sería ¿Por qué entonces no aventar el resto a convertirse en esa alternativa y sí a calcular lo que se puede obtener sin llegar a ser partido?

    La respuesta no tiene lugar a dudas, resulta más confortante mantenerse en el escenario cachando las migajas de una fuerza ya registrada (aunque desgastada) que les permita el uso de la franquicia para sobrevivir un tiempo más. Sin embargo, estas agrupaciones debieran tomar como ejemplo lo sucedido precisamente a los movimientos como el campesino otrora poderoso: circunscribirse a una fuerza partidista existente abandonando la causa, no tiene otra consecuencia que el fracaso y la posibilidad de extinguirse por completo aún y cuando sigan existiendo motivos para mantenerse en la lucha.

    Por esa razón, me parece que Construyendo Sociedades de Paz merece una mención a parte: no por su indiscutible afinidad al proyecto actual encabezado por Sheinbaum que muchos critican, sino porque, guste o no, de manera firme se dirigen a un sector que también exige resultados y que expresa su voluntad en las urnas. Si ese sector se organiza y se estructura desde las comunidades, habrá de representar a un sector amplio capaz de permear en otros, quizá ahí esté la clave.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.

  • Se vienen los nuevos partidos políticos

    Se vienen los nuevos partidos políticos

    La carrera por constituir nuevos partidos políticos comenzó este año y habrá de culminar el siguiente, aunque pareciera que, del largo listado, pocos serán los que alcancen el objetivo, y no tanto por el de por sí complicado proceso y requisitos, sino por la imagen que presentan ante la ciudadanía.

    No pretendo dedicar este espacio a hablar de las particularidades de cada una de las agrupaciones aspirantes, sino de lo que debería ser lo realmente importante, me refiero a la opinión que tiene la ciudadanía en general y a la lógica con la que dichas agrupaciones buscan entrar en el escenario partidista. Por ejemplo, en esta sociedad mexicana cada vez más informada, el ciudadano ha comprendido que más allá de las siglas, lo que realmente es importante es la manera que tienen los partidos actuales de conducirse ante el acontecer político. Hasta hace una década, resultaba impensable que un sector de la población estuviera al tanto de temas tan trascendentales como la reforma judicial, es más, para la mayoría poca importancia significaba quien o quiénes eran designados como ministros o jueces, a estos sólo se recurría como a los seguros de auto: no se ocupan hasta que se ocupan. 

    Pero en la actualidad es todo lo contrario, insistimos en que se debe en gran medida a que la gente tiene más posibilidades de informarse sobre este y otros temas, ya sea por el ensanchamiento de las opciones noticiosas o porque, sencillamente la verdadera alternancia en el poder en 2018 atrajo la atención de más sectores y no solo de los involucrados en la vida política. Así que, para bien de la democracia, hoy no existe manera de que temas de alto impacto para la sociedad pasen desapercibidos y eso, se vea por donde se vea, no es más que de beneficio para todos. 

    Aquí, con la intención de las asociaciones que comenzaron la travesía de los requisitos del INE, entre ellos la no fácil tarea de celebrar las asambleas ya sea estatales o distritales, así como el número de afiliados requerido (más o menos 256 mil personas), lo interesante es revisar el avance que tienen hasta el momento las primeras tres asociaciones que van a la cabeza:

    Construyendo Sociedades de Paz, A. C.  lleva un total de 103 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 70, es decir, 33 han sido declaradas nulas por falta de quórum. Personas Sumando en 2025, A. C. lleva un total de 95 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 47, es decir, 48 han sido declaradas nulas por falta de quórum y, finalmente, Que Siga la Democracia, APN. lleva un total de 14 asambleas intentadas de las cuales han prosperado 9, es decir, 5 han sido declaradas nulas por falta de quórum. 

    Si bien el tiempo para realizar las asambleas se va acortando y pareciera que los demás aspirantes comenzarán a tener en contra el tiempo, es muy probable que Construyendo Sociedades de Paz, sea el único con la posibilidad real de convertirse en partido. No causaría extrañeza esa posibilidad pues el antecedente de este instituto se remonta al Partido Encuentro Social y, posteriormente lo que sería el Partido Encuentro Solidario. Pero aquí entra lo interesante, ¿cómo percibe la ciudadanía que no se identifica ni con MORENA ni con la oposición este nuevo esfuerzo encabezado por el Dr. Hugo Érik Flores? La respuesta pudiera estar en algo que es completamente real, ese equipo ha jugado con una postura ideológica firme basado en sus orígenes, que no a todos pudiera parecer, pero que opta por la construcción de una tercera vía en el esquema partidista que puede detonar en una participación electoral amplia capaz de garantizarle, tanto la constitución como partido, como el anhelado porcentaje para permanecer entre las opciones electorales.

    No es un tema menor, hoy en día MORENA desencanta (por las razones que se quiera) a la militancia, incluso a la propia presidencia de la república que en ocasiones dedica tiempo para señalar las pifias y el interés de priorizar ganar elecciones aunque con eso se pierda credibilidad. En frente, ni las campañas de Movimiento Ciudadano de erigirse como opción de la ciudadanía, ni mucho menos la complicidad del PAN y lo que queda del PRI, son capaces de articular un movimiento verdadero que los haga impactar entre las preferencias electorales.

    Estando así las cosas, suponiendo que las dos primeras posiciones refiriéndonos a quienes han celebrado más asambleas logren convertirse en partidos políticos, lo cierto es que tendrán frente a sí una tarea fundamental: o verdaderamente adoptan un programa que los identifique con lo que requiere el electorado o de plano se sumergen entre uno de los bandos aunque esto no les garantice obtener la votación necesaria.

    En lo personal considero que quien tiene más cualidades en este momento para aparecer en el escenario, cosa que demuestran las asambleas celebradas, es Construyendo Sociedades de Paz, y, si prevalece la lógica de convocar de manera plural y abierta a distintas fuerzas, para 2030 la contienda se tornará aún más interesante pues nadie duda, ni siquiera sus retractores, de la capacidad de Hugo Érik para construir una alternativa real. Así lo dejan en claro las agrupaciones que seguramente están queriendo sumarse con él al verse imposibilitados para alcanzar las asambleas cuando menos.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente.
  • Sinaloa de Leyva, una oportunidad para la educación especial

    Sinaloa de Leyva, una oportunidad para la educación especial

    Es cierto que en la política de Bienestar impulsada por el gobierno actual se ha priorizado la atención a los sectores vulnerables del país, también lo es el hecho de que, para acabar con los años de rezago, se ocupa trabajar a marchas forzadas, pero como hemos insistido en este espacio, la participación conjunta entre el gobierno, la iniciativa privada y las organizaciones de la sociedad civil, pueden rendir frutos de manera más rápida y eficaz, sobre todo en municipios que presentan dificultades de índoles diversas.

    Sinaloa de Leyva por ejemplo es uno de los municipios del Estado de Sinaloa que merecen atención prioritaria y que, de generar alianzas significativas, se puede convertir en modelo que sirva de ejemplo para otros municipios. Por citar un caso: en el tema de la salud hay cifras que merecen una revisión puntual para elaborar estrategias integrales en beneficio de la niñez fundamentalmente.

    La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la discapacidad como un término general que abarca las deficiencias, las limitaciones de la actividad y las restricciones de la participación, identificando varios tipos de discapacidad como la discapacidad física, la intelectual, la sensorial, la cognitiva, y la discapacidad psicosocial. En el Estado de Sinaloa, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) se estima que hay más de 140,000 personas con discapacidad, lo que representa aproximadamente el 7% de la población total del estado, incluso, de acuerdo a cifras de la misma dependencia, en ese Estado que sufre las consecuencias de los enfrentamientos entre grupos de la delincuencia organizada, se calcula que existen casi 40 mil niñas y niños con algún tipo de discapacidad entre las que sobresalen el autismo y el TDAH. Si sumamos estos factores más el hecho de que el municipio de Sinaloa de Leyva enfrenta condiciones de pobreza y rezago, la consecuencia real y alarmante es que, en conjunto, todos los factores imposibilitan la atención especial de carácter integral para las personas con discapacidad, insistimos, especialmente para la niñez.

    Sin embargo, existen esfuerzos de colectivos y de autoridades municipales que comprenden la importancia de priorizar acciones relacionadas con la cultura, la atención a la salud y a la educación como medio que no sólo aporte a la reivindicación de los derechos humanos fundamentales, sino también a sembrar una semilla que en el medio plazo contribuya a la pacificación desde los municipios. 

    A propuesta de una luchadora social del Estado de Sinaloa, Elia Amador, se ha comenzado a elaborar un proyecto entre las autoridades educativas del Estado, así como con las autoridades municipales de Sinaloa de Leyva que consiste en destinar un espacio físico para establecer la Primer Casa de Atención Integral Psicopedagógica de Educación Especial a Nivel Básico personalizada para niñas y niños diagnosticados con Trastorno de Espectro Autista (TEA) y Trastorno por Déficit de Atención por Hiperactividad (TDAH) y que reivindique el derecho a la educación de todas las niñas y niños que presenten esa condición. No se trata de un tema menor, desde la perspectiva de los colectivos, así como la buena voluntad mostrada hasta el momento por las autoridades, establecer un espacio de esta naturaleza motivando la participación coordinada de distintos sectores, sería de especial beneficio para las niñas y niños, especialmente en las áreas socioemocional, psicomotriz, cognitiva y del lenguaje que ayudaría a los estudiantes a desarrollar al máximo su potencial para alcanzar una pronta y mejor adaptación en las diferentes etapas de su desarrollo.

    Para lograr este objetivo, se ha establecido un grupo de responsables con experiencia en la materia, que habrán de presentar el proyecto educativo, así como el plan de trabajo que requiera la SEP. Dicho grupo cuenta con el conocimiento y recursos pedagógicos suficientes para favorecer el desarrollo, adquisición y/o fortalecimiento de conocimiento, aptitudes y habilidades de los alumnos en cualquier proceso de enseñanza – aprendizaje y su misión es lograr en el corto plazo convertirse en el mejor Centro de Atención Integral en su tipo, a nivel regional y nacional, reconocidos por los pacientes, las familias y por la sociedad en general. 

    Sinaloa de Leyva puede ser la punta de lanza de un nuevo esquema de colaboración que demuestre que no hay esfuerzo que deje de valer la pena cuando se trata de trabajar por la niñez de este país; la pelota está en la cancha de las autoridades educativas del Estado de Sinaloa, y, desde la colectividad, confiamos en que otorgarán todas las facilidades que se requieran para materializar este proyecto.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente