La medida busca reducir el consumo de bebidas azucaradas y destinar los recursos a salud y educación, así como impulsar hábitos más saludables en la población.
Durante la Mañanera del Pueblo de este 11 de septiembre, el subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud, Eduardo Clark García Dobarganes, afirmó que la evidencia internacional demuestra que limitar productos dañinos como el refresco mejora la salud individual y poblacional, fortalece la productividad y genera recursos para la salud y educación. “Es una política probada en más de 119 países, con resultados positivos en Reino Unido, Sudáfrica, Chile y Estados Unidos”, señaló.
La ingesta promedio de refrescos en nuestro país alcanza los 166 litros por persona al año, lo que equivale a 15 cucharadas de azúcar diarias, siendo estas bebidas la principal fuente de azúcar en la dieta. Las consecuencias del abuso de estas bebidas son graves: 1 de cada 3 niños tiene sobrepeso u obesidad, más de 100 mil personas requieren diálisis, se realizan 227 mil amputaciones anuales relacionadas con la ingesta excesiva de azúcar y la diabetes provoca más de 100 mil muertes al año.

El impacto económico es también significativo: los sistemas de salud del país destinan cerca de 180 mil millones de pesos anuales para atender enfermedades vinculadas con el sobrepeso y la obesidad, lo que representa 415 mil pesos por paciente al año, cifra que resulta insostenible.
Con el incremento del IEPS de 1.65 a 3.1 pesos por litro, se espera una reducción del 7% en el consumo de refrescos, lo equivalente a un ahorro de 41 mil millones de pesos que serán destinados íntegramente a la salud de los mexicanos.
El titular de Salud, David Kershenobich Stalnikowitz, detalló que la estrategia abarca prevención y promoción, atención moderna en primer nivel con tamizaje y seguimiento vía IA, tratamientos innovadores accesibles a todos, y atención de alta especialidad con cobertura de diálisis y fortalecimiento de la donación de riñón.

Zoé Robledo, director del IMSS, destacó que estas medidas son igualadoras sociales, facilitando el acceso a diagnóstico y control de diabetes, hipertensión e insuficiencia renal, mientras Martí Batres, director del ISSSTE, señaló la importancia para los derechohabientes mayores de 60 años.
Finalmente, Alejandro Svach Pérez, director del IMSS Bienestar, calificó la implementación como un día de fiesta para México, pues combina pedagogía social y presión para que la industria genere productos más saludables. Esta política integral marca un paso decisivo en la lucha contra las enfermedades