Mientras el gobierno de Donald Trump presiona a condados para retener a migrantes en cárceles locales, una red de apoyo comunitario en Binghamton, Nueva York, se organiza para resistir la política migratoria federal. Vecinos, iglesias y activistas han creado un “nuevo ferrocarril subterráneo” que brinda alimentos, transporte y protección a personas sin documentos, incluso organizando bodas clandestinas y cuidando a sus hijos.
De acuerdo con La Jornada, pese a que el alguacil del condado Broome firmó un acuerdo con ICE, la comunidad responde con protestas, talleres de “conoce tus derechos” y campañas contra la colaboración con autoridades migratorias. Grupos como Ciudadanos Preocupados de Binghamton y la Red de Justicia en las Cárceles impulsan leyes para prohibir que las cárceles locales sirvan de centros de detención migratoria.

Activistas locales han logrado reducir la presencia de inmigrantes detenidos en la zona, al pasar de cerca de 100 a menos de 10 personas en prisión. “ICE llega al condado Broome y el pueblo dice ‘no’”, sostienen los organizadores. En un estado donde solo 4 de los 62 condados colaboran con ICE, la resistencia crece con apoyo de iglesias, mezquitas, sindicatos y prisioneros, formando un movimiento social que desafía la criminalización de la migración y exige respeto a los derechos humanos.
Comentarios