En las recientes elecciones, Morena no solo confirmó el respaldo obtenido en 2018, sino que lo reforzó, asegurando las posiciones necesarias para reformas constitucionales.
Este 2 de junio, el partido Morena logró que su candidata, Claudia Sheinbaum, se perfilará para el cargo presidencial y consiguió que su partido obtenga las posiciones necesarias para aprobar el “plan C” en el Congreso, además de retener seis estados clave.
Según datos de la consejera presidenta del INE, Guadalupe Taddei, Morena y sus aliados obtendrán mayoría calificada, lo que les permitirá reformar la Constitución sin necesidad de acuerdos con la oposición.
En la Cámara de Diputados, Morena asegura una mayoría calificada con entre 346 y 380 curules, y en el Senado, alcanzaría entre 76 y 88 escaños, con un nivel de certeza superior al 95%.
Tras esta jornada electoral, el mapa político de 2024 se pinta de guinda: Morena ganaría la presidencia, el Congreso y las gubernaturas en seis estados que ya gobernaba.
El balance de las elecciones federales y locales de este domingo mostró una participación del 60% al 61.5% de los 98.3 millones de ciudadanos inscritos en la Lista Nominal de Electores, ligeramente inferior a la de 2018.
Claudia Sheinbaum habría obtenido entre el 58.3% y el 60.7% de los votos, superando por más del 30% a la candidata opositora, Xóchitl Gálvez.
Esta fue la primera elección en que Morena puso a prueba su gestión federal y estatal, y ambos niveles de gobierno fueron refrendados.
Entidades como Veracruz, Morelos, Tabasco, Chiapas, Puebla y Ciudad de México, que habían sido ganadas en 2018, fueron nuevamente retenidas, según los datos disponibles, sujetos a confirmación oficial y calificación en tribunales.
De esta manera, Morena conservará las seis entidades en disputa y seguirá gobernando en 23 estados del país, manteniendo su presencia preelectoral.
Comentarios