Categoría: Juan Rosales

  • Este singular viernes 1 de julio

    Este singular viernes 1 de julio

    Nos da mucho gusto conmemorar, aquí, en Paraíso, Tabasco, el cuarto aniversario del triunfo en la elección presidencial del 1º de julio de 2018.

    Andrés Manuel López Obrador. Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.

    Creo que estarán de acuerdo conmigo en que el viernes de la semana que acaba de concluir fue un día especial, único y que debemos mantenerlo en nuestra memoria colectiva. La coincidencia de tres momentos que ya forman parte del hoy y el mañana mexicano, a saber: la Inauguración de la 1ª. Etapa Constructiva de la Refinería Olmeca, como lo expresaba el prudente título del evento oficial, la conmemoración del Cuarto Año del Triunfo Democrático Histórico y la presentación del Informe de Avances del Gobierno Federal al cumplirse esa icónica efeméride.

    No podemos o mejor dicho no debemos escatimarnos la abierta manifestación de felicidad y orgullo que estos acontecimientos ocurridos el pasado 1 de julio nos provocan. A través de las redes sociales y de los programas conducidos por periodistas y/o comentaristas alternativos a los medios corporativos, se mostraron infinidad de expresiones de alegría y confianza en la incansable labor que realiza el gobierno de López Obrador.

    Para fortuna de millones de mexicanos estas satisfacciones van siendo cada vez más frecuentes. Sin duda hay ámbitos en los cuales los resultados aún se muestran limitados, o no responden a las expectativas de la población como la seguridad o la atención médica de calidad, por citar tan solo dos problemáticas que están siendo atendidas. Sin embargo, si revisamos detenidamente el informe presentado confirmaremos que el gobierno de la 4T trabaja con base en un programa que ya, desde 2005, presentó al país y no en “ocurrencias” como afirman tajantemente sus opositores.

    Nuestro acontecer de hoy contrasta con la realidad que durante décadas de dominio neoliberal estuvo sustentada en la desesperanza, la desilusión y por ende en la apatía y la baja autoestima de quienes fueron ignorados por el modelo económico y político que sólo atendía a una minoría que disfrutó de todos los privilegios.

    Varias generaciones crecimos con el síndrome de la crisis permanente que nos hacían creer era nacional y nos afectaba a “todos”. En contraste, la retórica de esos tiempos nos hacía pasar como si efectivamente fueran sociales los beneficios que exclusivamente disfrutaba la oligarquía, que monopolizó todo a partir de las famosas privatizaciones de casi todo bien público.

    Por ello, no debemos permitir que la derecha con su narrativa que, si la analizamos con atención, solamente alardea de su ignorancia, de mentir cotidianamente, de distorsionar la realidad y de su odio y su rencor para con la mayoría de nosotros, nos haga dudar de que estamos del lado correcto de la historia.

    No le permitamos a esa oposición moralmente derrotada que nos eche a perder la fiesta Obradorista. Confrontémosla con unidad, unidad y más unidad. Solamente unidos haremos posible la continuidad de un gobierno de la 4T más allá de AMLO. Sigamos haciendo historia con nuestra esperanza por delante.

  • La guerra sucia contra AMLO

    La guerra sucia contra AMLO

    Al escribir estas líneas escucho un alarmante resumen de las diversas narrativas disfrazadas de informaciones que los medios corporativos nacionales e internacionales, opinólogos y pseudoperiodistas, e inclusive políticos estadounidenses, se han propuesto darle toda la cobertura a su alcance a lo que constituye un escalamiento de la infodemia en contra del presidente y su gobierno.

    La amplitud de la temática sobre la cual se lanzaron de manera coordinada, mostrando, como lo saben hacer, un “nado sincronizado” distorsionador de la realidad, inicia con el asesinato de dos religiosos y un laico en la sierra tarahumara en el estado de Chihuahua, vinculándolo con el supuesto incremento de la violencia en todo el país, en particular de los homicidios dolosos; la inflación y el aumento de las tasas de interés, por parte del Banxico, que según la derecha alcanzan niveles “históricos”; la negativa por parte de la Administración Federal de Estados Unidos de otorgar a México la categoría 1 y mantenerlo en la 2 de acuerdo con la Organización de Aviación Civil Internacional, lo cual llena de gozo a los opositores, así como el sobrecosto que está teniendo la construcción de la Refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco, como si esa “vigilancia” en el gasto público la hubieran mantenido siempre en los sexenios anteriores.

    El tratamiento mediático que dieron a esa diversidad de asuntos se enmarca en la guerra sucia, de por sí cotidiana, que los medios corporativos y sus socios extranjeros mantienen cotidianamente a la que, por cierto, se le agregó la acusación en la que pretenden vincular al presidente López Obrador y al partido Morena con el narcotráfico, misma que se ha utilizado, de manera recurrente, desde inicios del sexenio, agudizándose en el contexto de los procesos electorales ocurridos en los años 2021 y 2022.

    No es casual que esta narrativa con amplia difusión, pero sin ningún fundamento, aparezca y desaparezca de acuerdo con determinadas coyunturas que a la oligarquía le resultan convenientes en su estrategia promotora de inestabilidad y manipulación política. Al final de este comentario dejo el enlace del estudio Elecciones y el narco. ¿Realidad o narrativa orquestada? publicado por el Programa Universitario de Estudios sobre Democracia y Justicia Social de la UNAM.

    En la conferencia matutina del viernes pasado, 24 de junio, el presidente López Obrador dio respuesta amplia y documentada a prácticamente todos esos señalamientos falsos, enfatizando que en el país existe plena libertad de expresión, por lo que se garantiza que todos esos mensajes sigan circulando por lo medios sin ninguna restricción, al menos gubernamental.

    En torno al “incremento” de los homicidios dolosos mostró un cuadro estadístico que desmiente los infundios periodísticos afirmando que los dos sexenios anteriores, Calderón (FCH) y Peña (EPN), tuvieron sustanciales aumentos año con año. Durante los dos sexenios este delito pasó de casi 9 mil casos en 2007 a 36.6 mil en 2018; durante el presente gobierno en 2019 se registraron 36.6 mil y en lo que va del 2022, claro que es el primer semestre, se han registrado cerca de 11 mil, mostrando una tendencia a la baja, sobre todo del 2020 al 2021, al pasar de 36.5 a 33.3 mil homicidios. Es importante tener presente que el homicidio doloso es un delito del fuero común por lo que su combate corresponde a las autoridades municipales y estatales, aunque el gobierno nacional no deja de intervenir con las fuerzas federales.

    Acerca de los temas económicos, AMLO señaló que el aumento en la tasa de interés, la cual pasó de 7 a 7.75, es una decisión tomada de manera autónoma por el Banco de México, la cual por cierto no es histórica ya que al llegar la Cuarta Transformacion esa tasa estaba en el 8.5%. Y, recordando sus posturas contrarias a la ortodoxia económica neoliberal, propuso que en definitiva es necesario que los técnicos empiecen a diseñar otras alternativas para controlar la inflación, hay que regresar a la idea original de que los pueblos progresan fundamentalmente con producción, que eso es lo básico, producir, no apostar todo al mundo financiero, a la especulación; se requiere impulsar la actividad productiva en todo el mundo… producir, producir, producir… esa puede ser una solución.

    Con respecto al tema de la calificación otorgada a la aviación mexicana por parte de la agencia estadounidense, López Obrador indicó que no todas las organizaciones internacionales son honestas. Por cierto, también comentó que esa organización envío a su gobierno, a las tres de la mañana del día anterior al que se definiera la continuidad o no de la construcción del aeropuerto en Texcoco, un informe señalando la problemática del espacio aéreo entre el AICM y el AIFA, como principal causal para la inviabilidad del Felipe Ángeles. Asimismo, que ya se realizan las gestiones pertinentes para recuperar la categoría 1.

    Acerca del sobrecosto en más de 10 mil millones de dólares (mmd) que difunden los opositores en la construcción de la refinería de Dos Bocas, el presidente informó que se exagera en señalar que será de más de 18 mmd el costo final. Originalmente se había presupuestado en 8 mil millones de dólares y efectivamente ha habido un incremento, autorizado por el Consejo de Pemex, pero el precio final llegará a entre 11 y 12 mmd.

    Finalmente, comparto un par de párrafos que el propio López Obrador leyó al referirse a sus críticos quienes afirman que ya resulta “enfermiza” su frase de abrazos y no balazos, haciendo caso omiso a que solamente la hace en sentido figurado. La referencia a su más reciente libro publicado con el título A la mitad de camino la hace por la coincidencia de su estrategia para combatir a la violencia con lo planteado por el economista John Kenneth Galbraith, en su libro Una sociedad mejor, sobre ese mismo tema en los siguientes términos: “…la delincuencia y la convulsión social de nuestras grandes ciudades son producto de la pobreza y de una estructura de clases corruptas, que ignora o menosprecia a los pobres.

    La solución actualmente aceptada —así el pensamiento dominante— son las medidas policiales, el confinamiento de los individuos de tendencias criminales y la lucha cara y fútil contra el narcotráficoA un plazo más largo o más allá de cualquier plazo, la solución más humanitaria, y probablemente la menos cara, es acabar con la pobreza, que induce al desorden social…”

    Aquí abajo les dejo algunas referencias para que complementen lo antes expuesto.

  • Decálogo para enfrentar el cambio climático

    Decálogo para enfrentar el cambio climático

    Saliendo al paso, como lo hace cotidianamente, de las críticas que los opositores han sostenido y que se agudizaron durante las semanas de los foros en los que expusieron sus posturas en contra de la reforma eléctrica, el viernes pasado el presidente López Obrador participó en el Foro de las Principales Economías sobre Energía y Clima, en el que dio a conocer las diez acciones que lleva a cabo el Gobierno de México para hacer frente al cambio climático.

    En este foro al que asistieron a distancia además de nuestro primer mandatario, representantes de otras 23 naciones, entre ellas Estados Unidos a través de John Kerry, responsable en la Casa Blanca del tema cambio climático, y del presidente Joseph Biden, quien al concluir la intervención de AMLO y antes de retirarse del evento agradeció a los asistentes, pero señaladamente al presidente López Obrador por el trabajo conjunto, asegurando que ambos países seguirán colaborando en enfrentar este problema.

    El decálogo presentado por López Obrador contiene acciones que la 4T ha venido desarrollando a lo largo de los casi cuatro años de gobierno, contrariamente a la narrativa que la oposición de inmediato desplegó en medios corporativos y redes sociales, acusando que eran medidas improvisadas y para “cubrir el expediente” de la reunión.

    Las diez acciones centrales, de las que se derivan otras más, implementadas por nuestro gobierno en la lucha contra el cambio climático, refieren medidas relacionadas con los recursos no renovables producidos en México y también con aquellas vinculadas al desarrollo de energías no contaminantes.

    Efectivamente, el presidente López Obrador enumeró y describió de manera breve una a una las siguientes: 1) Modernización de 16 plantas hidroeléctricas; 2) reducción hasta en un 98 por ciento de emisiones de gas metano en los procesos de exploración y producción de la industria petrolera; 3) inclusión en el propósito mundial de lograr para el 2030, la producción hasta en un 50% de vehículos cero emisiones, en cuyo objetivo la reciente nacionalización del litio mexicano juega un papel estratégico; 4) construcción de un parque solar fotovoltaico en Puerto Peñasco, Sonora, México, el cual pudiera ser el más grande de América Latina, este último comentario no lo hizo el presidente; 5) compromisos con empresas estadounidenses para generar energía solar y eólica.

    Completan el decálogo presentado internacionalmente por el presidente: 6) Creación de parques solares en la frontera mexicana con su vecino del norte, y la construcción de redes de transmisión de energía para exportarla a California y otros estados; 7) autosuficiencia mexicana en gasolina, diésel, turbosina gracias a que desde 2019 se realiza la modernización de 6 refinerías, se adquirió una en Texas y en breve será inaugurada la nueva en Dos Bocas, Tabasco; 8) procesamiento de toda nuestra materia prima en México, gracias a la construcción en Tula, Hidalgo y en breve se iniciará en Salina Cruz, Oaxaca, de dos coquizadoras para transformar el combustóleo, para alcanzar un impacto ambiental menor o incluso dejar de contaminar; 9) realización del programa de reforestación más ambicioso del mundo en un millón de hectáreas de árboles frutales y maderables, el cual da empleo a más de 420 mil campesinos en sus propias parcelas, con una inversión anual de 1,500 millones de dólares, con lo cual se absorberán casi 4 millones de toneladas de bióxido de carbono y 10) compromiso de México para que en el 2024 se alcance una producción de energía utilizando el 35% de fuentes limpias o renovables.

    La trascendencia de estas medidas salta a la vista, y no necesitamos ser expertos para concluir que el impacto de todas ellas cobra relevancia ante el amplio espectro de vertientes que atiende. Por supuesto que muestra la vocación del gobierno mexicano por atender los compromisos internacionales en torno al cambio climático. A nivel nacional atiende la urgente necesidad de corregir el deterioro y obsolescencia en la que el neoliberalismo dejó a la industria energética en general y petrolera en particular. Con la nacionalización del litio, AMLO posiciona a México entre los países de vanguardia en el uso y aprovechamiento de este mineral. Los beneficios económicos para la población urbana y rural repercutirán sin duda en sus bolsillos.

    Una vez más podemos constatar que los cuestionamientos de diversos grupos opositores y pseudoambientalistas, quienes acusan al gobierno de la 4T de “fomentar el uso de energías sucias”, “no hacer nada para enfrentar el cambio climático”, e incluso de “violar los acuerdos internacionales de los que forma parte nuestro país” y que han reiterado a través de casi todos los medios corporativos que les sirven de “caja de resonancia”, son parte de la narrativa derechista y reaccionaria, integrada básicamente solo con inferencias y relatos a la que debemos confrontar con evidencias y datos.

    En este enlace pueden ver la presentación que hizo López Obrador del decálogo de la 4T en materias de energía y clima:

  • Eso que llamamos sentido común

    Eso que llamamos sentido común

    Cuando nos referimos al sentido común hacemos énfasis en la noción relativa a la capacidad que tenemos los humanos para juzgar razonablemente las situaciones de la vida cotidiana y decidir con acierto y de forma adecuada lo procedente. Más o menos esta podría ser una definición de lo que a simple vista resulta ser el sentido común.

    Sin embargo, podemos también relacionar el sentido común con la narrativa que un sistema dominante crea, genera, produce y reproduce socialmente para explicar y/o justificar la hegemonía de una minoría privilegiada. Esa reproducción ideológica forma parte de la lucha de la oligarquía por el control, por el dominio pleno sobre la mayoría de la población. Esta concepción nos ayuda a entender lo que el sentido común imperante en el neoliberalismo produce como la visión del mundo.

    Es decir, a partir de esa visión del mundo es que un sistema económico-político conforma el conocimiento y la perspectiva que de sí mismo y de la sociedad se tiene. Es en este marco en el que el sentido común adquiere un tipo y un modo de producir memoria histórica, es decir, de ordenar los hechos sociales e históricos de acuerdo con una estructura ideológicamente armada en el proceso de constitución de una cultura política como hegemónica.

    Recomiendo ampliamente la lectura del texto de Luis Tapia 1 en el que explica, a partir de la perspectiva teórico-política propuesta por Antonio Gramsci, al sentido común como parte de la lucha por la hegemonía y cómo se establece la dominación neoliberal, pero también cómo es posible construir bloques históricos antagónicos a la hegemonía de una minoría privilegiada. Es decir, es posible confrontar el predominio neoliberal a partir de alternativas como el régimen que la Cuarta Transformación se encuentra conformando.

    A lo largo de los sexenios bajo el predominio neoliberal se produjo un tipo de sentido común, podría decirse ad hoc, al que la estructura económica requería para su reproducción. Podríamos afirmar que la estrategia neoliberal para consolidarse a nivel ideológico requiere desarrollar una narrativa que, paralelamente a la privatización económica y social, destruya los ámbitos de nacionalización de los recursos naturales y los procesos de transformación institucional y empresarial de servicios públicos.

    El dominio de la privatización por sobre la nacionalización, a nivel económico, implicó también la articulación de una concepción del mundo y del conocimiento. En ese sentido, el neoliberalismo emprendió procesos de sustitución de creencias en ambos aspectos creando un discurso para explicar los hechos contemporáneos en favor de una perspectiva capitalista.

    Es interesante hacer notar la ofensiva que lanza el neoliberalismo, sobre todo durante las décadas de los años ochenta y noventa (sexenios De la Madrid, Salinas y Zedillo) y que en nuestro país tuvo diversas expresiones con el objetivo de sustituir las “creencias” predominantemente nacionalistas, por medio de las cuales la mayoría del pueblo organizaba su comprensión del país, la región y el mundo político y económico. Por ejemplo, cuando se suprimieron de los libros de texto gratuito las referencias especialmente las relacionadas con la guerra entre México y Estados Unidos, el Tratado Guadalupe-Hidalgo y la pérdida de más de la mitad del territorio nacional.

    Este proceso, inducido a la fuerza sin consulta alguna, desplegó una nueva discursividad que se canalizó a través de los medios de comunicación corporativos, que siempre han estado al servicio de las élites gobernantes; de los organismos internacionales (FMI, BM, BID), las consultoras financieras con sede en Wall Street, los líderes de opinión especialistas en economía y finanzas e intelectuales “orgánicos” afines al libre mercado.

    En México surgieron espacios en medios electrónicos, diarios y revistas especializadas en economía; columnistas, intelectuales y hasta académicos que se dieron a la tarea de “enseñar” a la población “neófita” la modernidad del consumo y la cultura del esfuerzo individual para legitimar esta estrategia de dominación, con lenguajes aparentemente técnicos de las ciencias sociales, sobre cómo debería organizar la realidad, sin alternativas, con el imperativo enarbolado por Margaret Thatcher del “no hay opción”.

    En la organización en la que el sentido común, antes descrito, responde a la hegemonía, la población ocupa lugares de subordinación, de recepción de mando, exclusivamente “dispuesto” a recibir órdenes de una autoridad con jerarquía. Frente a esto, Tapia propone la autoorganización de la población, ya que produce poder y libertad y genera un proceso de reforma moral e intelectual.

    Y así lo confirma: “… La autoorganización nos constituye y reconstituye como sujetos en fluidez. La autoorganización no nos estabiliza en las relaciones de poder, sino que es una apertura a nosotros mismos y en relación con el conjunto de relaciones sociales que nos condicionan y que afectamos a partir de la propia iniciativa”.

    La organización de los trabajadores es condición histórica y política de la nacionalización de los recursos naturales y del carácter público de la educación, la salud, el agua, etc., sin embargo, la desarticulación de la clase obrera era la condición de la privatización de todos los sectores públicos. En la inmovilidad y cooptación de algunos de los principales sindicatos, la práctica del outsourcing contribuyó de manera importante, aunque no todos los grandes sindicatos sufrieron esa desarticulación, sobre todo nos referimos a los sindicatos de las empresas que conservaron su carácter público, como las del sector energético, en estos casos mantuvieron cierto nivel de combatividad y lucha en pos de reivindicaciones salariales y, cuando se requirió, también de carácter político y social.

    Para el neoliberalismo la organización social se orienta exclusivamente a la funcionalidad en la esfera mercantil y si el mercado exige aceptar una sola opción, pues el “librito de la ortodoxia” marca la pauta para que funcione el capitalismo. Por ello, en su análisis está desprovista de una perspectiva política o ideológica, de ahí que no se cuestionen estructuras de dominación. El neoliberalismo tuvo que sustituir de la memoria popular la creencia en el derecho a cogestionar lo público y a cogobernar el país, la política se convirtió en asunto de los políticos.

    La coyuntura histórica que representó, para millones de mexicanos, el triunfo de Andrés Manuel López Obrador constituye una oportunidad para que el sentido común predominante durante los gobiernos de corte neoliberal se reconstruya con una narrativa que confronte la dominación de una élite.

    Al respecto, López Obrador se ha referido a algunos rasgos, que nosotros consideramos, podrían ser las premisas de un sentido común que confronte al predominante durante el neoliberalismo. Lo plantea así: “… fue la revolución de las conciencias, lo que permitió derrotar al régimen oligárquico en los comicios del 1 de julio de 2018”. Y agrega, “… hoy la mayoría de la población está informada de las realidades políticas y mantiene una vigilancia constante sobre el quehacer gubernamental e institucional. Este cambio trascendente está siendo conducido a una forma superior del ejercicio del poder: la democracia participativa”. 2

    Continua el presidente subrayando “… tenemos la certeza de que los principios éticos y vanguardistas de nuestro pueblo son las claves del nuevo pacto social y del modelo de desarrollo para el México que está renaciendo tras la larga y oscura noche del neoliberalismo. Sin embargo, no es suficiente con que la sociedad esté informada debe, además, participar e involucrarse en las decisiones relevantes de quienes la representan en la función pública”.

    Creemos que los medios alternativos y las redes sociales pueden servir como instrumentos útiles, frente a los medios corporativos o tradicionales, a una ciudadanía cada vez más interesada en informarse, y lo que es más para establecer diálogos e interconexiones con quienes protagonizan y difunden acontecimientos a los que ya no son ajenos o de los que ya no son simples y “mudos testigos”.

    Esas premisas, en el marco del ejercicio de la participación del pueblo, podrían coadyuvar en el re-conocimiento que de sí misma haga la población y en la recuperación de la capacidad para la autoorganización.

    1Tapia, Luis. La reforma del sentido común en la dominación neoliberal y en la constitución de nuevos bloques históricos nacional-populares. CLACSO. Buenos Aires 2008. Pp. 101-112 El texto puede obtenerse gratuitamente en este enlace: http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/gt/20160224042016/07tapia.pdf
    2López Obrador, Andrés Manuel. Hacia una economía moral. Prólogo de Enrique Galván Ochoa. 2019 editorial Planeta. P. 91.
  • Cuando despertamos ya no estaba ahí*

    Cuando despertamos ya no estaba ahí*

    Titulo esta columna semanal parafraseando el brevísimo relato del escritor guatemalteco, de origen hondureño, Augusto Monterroso, el cual en tan solo siete palabras refiere el despertar y encuentro con el dinosaurio que todavía estaba ahí

    Sin embargo, al amanecer este lunes 6 de junio millones de mexicanos originarios de los estados de Hidalgo y Oaxaca se encontraron con la noticia de que gracias a la participación multitudinaria de la ciudadanía de esos estados, efectivamente la pesadilla había terminado porque el dinosaurio priista ya no estaba ahí. 

    Y no es porque no sean importantes los resultados obtenidos por Morena en las otras cuatro entidades: Aguascalientes, Durango, Quintana Roo y Tamaulipas, por supuesto que lo son, pero quise referirme a los estados en los que el Partido Revolucionario Institucional se mantuvo, con excepción de un sexenio en Oaxaca, en el poder por décadas.

    En Hidalgo, la sucesión de mandatarios militantes del Partido Nacional Revolucionario (PNR), del de la Revolución Mexicana (PRM) y del Revolucionario Institucional (PRI) comprende desde 1933 de manera ininterrumpida, es decir estamos hablando de 19 gobernadores, incluyendo a Omar Fayad Meneses, sin contar a quienes ocuparon la gubernatura siendo sustitutos, suplentes o provisionales. En suma, estamos hablando de 89 años.

    El caso de Oaxaca es muy similar al anterior. Desde 1932 se sucedieron 2 gobernadores del PNR, 2 del PRM y 17 del PRI, incluyendo a Alejandro Murat Hinojosa. Cabe mencionar que Gabino Cué Monteagudo, quien ocupó la titularidad del ejecutivo estatal durante el periodo que comprende de diciembre de 2010 a noviembre de 2016, representaba al partido Movimiento Ciudadano. O sea 84 años de predominio dinosáurico. 

    El saldo entonces para el prianato, hoy en día, es de tan solo dos gubernaturas: Coahuila y el Estado de México. Es decir que los priistas le deben a su actual presidente, Alejandro Moreno Cárdenas, quien ocupa esa posición a partir de agosto del 2019, hace tan solo tres años, la conclusión de una anunciada debacle priista, reflejada en la pérdida de 10 gubernaturas1

    Una buena práctica siempre es recurrir a la historia. Recordemos aquellas imágenes del acarreo multitudinario que los tres sectores del llamado “tricolor”, obrero (CTM), campesino (CNC) y popular (CNOP), esencialmente, pero había otras organizaciones las cuales se sumaban a las movilizaciones en favor de las políticas que casi siempre afectaban a quienes asistían forzados a esas manifestaciones.

    El control no solamente del poder ejecutivo sino del legislativo, a nivel nacional y en los estados, con mayorías realmente aplastantes frente a una incipiente representación de las entonces oposiciones, y el judicial que desde la Suprema Corte hasta los miles de jueces integraron una maquinaria que mantenía el control de todas las decisiones importantes en el funcionamiento del sistema mexicano. La instrumentación de las políticas que facilitaron la apropiación del país por parte de esa oligarquía es el resultado de todo ello. 

    Las luchas sociales que los mexicanos han decidido emprender en contra de ese estado de cosas tiene una larga data. Gracias a la movilización de la ciudadanía que por décadas ha enfrentado a ese sistema, hoy presenciamos efectivamente los inicios de un cambio de régimen. 

    La prácticamente desaparición, del otrora partido de Estado, coincide con la creciente participación de millones de mexicanos en el movimiento Obradorista. Las mayorías más vulnerables, “olvidadas” por el neoliberalismo, disfrutan de los beneficios que la Cuarta Transformación ha promovido y realizado en muy diversos ámbitos de la vida nacional. Un ingrediente destacado, lo constituye sin duda el sello que López Obrador le ha impreso a la forma de hacer política, estilo personal que se resume en la frase hacer la vida pública, cada vez más pública

    Es en este contexto en el que la campaña de los opositores al gobierno actual ha escalado y se expresa en una muy bien orquestada campaña a cargo de propagandistas, políticos y expolíticos priistas, medios electrónicos de difusión, voceros y líderes de opinión, aprovechando incluso espacios internacionales, como la reunión celebrada en México de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL), en donde se ha calumniado al presidente acusándolo de dictador y vinculándolo con la delincuencia organizada ligada al narcotráfico.

    El país ya no es propiedad de una minoría. México nos pertenece y lo estamos recuperando. En los últimos años esta recuperación ha avanzado con esperanza y conciencia. Este proceso es irreversible y esto lo saben los opositores que aun agrupándose no han logrado revertirlo. Están desesperados porque la movilización del pueblo los enfrenta y ante ello difícilmente sus proyectos tendrán éxito.

    Asistimos al fortalecimiento territorial de Morena no solamente frente al PRI, sino también a lo que queda del de la Revolución Democrática y a Acción Nacional organismos que perdieron Quintana Roo, Tamaulipas, y…, respectivamente. Les invito a completar este párrafo con los resultados en las entidades en las que las encuestas mostraban resultados más apretados como Aguascalientes y Durango. 

    • * Esta colaboración fue escrita el domingo 5 de junio. El título completo del relato de Monterroso es: “Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba ahí”.  1Campeche, Colima, Guerrero, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala, Zacatecas y ayer Hidalgo y Oaxaca.
  • Cuando a los periodistas se les daban balas y mucho presupuesto público

    Cuando a los periodistas se les daban balas y mucho presupuesto público

    El audio dado a conocer por la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, en el que claramente se escucha la voz de Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente del PRI nacional, afirmando sin ningún pudor que “a los periodistas no hay que matarlos a balazos, hay que matarlos de hambre”, si bien muestra la muy lamentable concepción que dicho personaje tiene de la labor periodística, expone en pocas palabras las prácticas que, de larga data, han caracterizado al poder en México para mantener a su servicio a comunicadores y medios corporativos.

    Por supuesto que a los periodistas honestos cuya labor era un problema para las élites económica y política, el sistema les ofreció no precisamente la inanición y hoy, familiares y amigos que les sobreviven mantienen sus exigencias de justicia, luego de que para esos informadores la única opción de los poderosos fueron los balazos.

    A propósito de la “máxima” del líder del tricolor, al que por cierto deben quedarle en esa posición como cinco minutos, o menos, de “no matar de hambre” a los periodistas, conviene traer a nuestra memoria los multimillonarios gastos presupuestales que gobiernos del prianismo destinaban a medios, voceros y opinólogos gracias a los cuales se “aceitaba” la relación, el vínculo pernicioso, entre poder y medios de comunicación. Tanto añoran esos tiempos idos que diariamente lo evidencian a través del odio y la frustración contra la 4T expresados en un sinfín de mentiras, calumnias y manipulación.

    Seguramente recordarán, estimados lectores, aquella campaña del sexenio peñista la cual disfrutó de gran difusión mediática, sobre todo durante el periodo de 2013 al 2016, basada en la frase Contar lo bueno. Bien pues en un estudio publicado por la organización Fundar, de la autoría de Paulina Castaño, bajo el título de: Contar “lo bueno”, cuesta mucho, se demuestra que la distribución del gasto oficial en esos años resultó en un ejercicio de 36 mil 261 millones de pesos. En ese lapso el gasto se incrementó anualmente en un 31.21% al pasar de 8 mil 154 mdp a 10 mil 699 mdp. En promedio 9.065 mil millones por año.

    La concentración en pocas manos explica muchas cosas. La publicidad oficial se dirigía básicamente a algunos grupos mediáticos a pesar de que más de mil medios se disputaban los ingresos gubernamentales. Televisa, TV Azteca y Grupo Imagen acaparaban los recursos destinados a la televisión; Radio Fórmula, Radio Centro, Imagen, MVS y ACIR estaban entre las radiodifusoras con grandes pautas publicitarias y entre los medios impresos los principales beneficiarios eran El Universal, Milenio, Excélsior, la cadena del Sol de México y La Crónica de hoy.

    Claro que también hubo recursos para los creadores de imagen y promotores de figuras públicas a quienes se les otorgaban millonarios contratos ya sea de manera directa o a través de empresas creadas ex profeso por ellos mismos. Entre estos encontramos los casos por todos conocidos de Joaquín López Dóriga y Enrique Krauze, pero a la lista habría que agregar a algunos más como Beatriz Pagés, Oscar Mario Beteta, Ricardo Alemán, Salvador García Soto, Luis Soto, Adela Micha, Raymundo Riva Palacio, Pablo Hiriart, Jorge Fernández Meléndez, Paola Rojas, Rafael Cardona, Martha Debayle, José Cárdenas, Marco Antonio Mares, Ricardo Rocha, Francisco Cárdenas, Raúl Sánchez Carrillo y el sitio Animal Político, por citar solamente a algunos.

    Ya en una de sus conferencias matutinas, me refiero a la del 25 de septiembre del 2020, López Obrador presentó un análisis de contenido en ocho medios impresos en el que puso en evidencia la revisión del sentido de las opiniones (positiva, negativa o neutral) que columnistas y articulistas expresan en torno al gobierno de la 4T. El análisis incluyó a los diarios El Financiero, El Universal, El Economista, La Jornada, Excelsior, El Heraldo de México, Milenio, Reforma. Se revisaron 148 textos, 95 de los cuales se refieren a la actual administración o sea el 64. 2%, de ese subtotal 63 son opiniones negativas, 21 neutrales y 11 positivas. En porcentajes corresponde el 66.3 por ciento a opiniones negativas, 23.1 neutrales y 10.6 son positivas.

    De lo antes expuesto podemos sacar algunas conclusiones. La razón central del vínculo entre medios y la élite gobernante se basa esencialmente en los beneficios generados a partir de recursos públicos de los cuales prácticamente sostienen sus fructíferos negocios corporaciones mediáticas y sus voceros, situación que ha cambiado radicalmente con la 4T; esa relación perversa deformó totalmente la responsabilidad ética que los medios masivos le deben a la sociedad, ya que en lugar de la independencia necesaria entre comunicadores y poder, se creó una dependencia basada en beneficios económicos y chantaje.

    Un efecto destacado de toda esta situación prevaleciente por décadas en México es la monopolización de los medios electrónicos e impresos en unos cuantos grupos, entre 11 y 15, con vínculos incluso familiares, éstos son quienes hoy a través de sus espacios tejen una trama que cotidianamente se encarga de construir una percepción totalmente deformada del gobierno de la 4T y que impacta principalmente en sectores sociales que no cuentan con espacios informativos alternativos, pero también en aquellos que se beneficiaron de relaciones de amistad y compadrazgo con los grupos privilegiados.

    No quiero parecer simplista y circunscribir a una cuestión de pesos y centavos la confrontación entre dos proyectos de país. Efectivamente el tema de los beneficios económicos es importante pero el tema central estriba en las radicales posturas ideológico-políticas de las dos visiones predominantes en el acontecer nacional.

    Cierro agradeciendo el contar con estos espacios en los que participamos exponiendo nuestras posturas sobre temas tan vigentes y diversos en los tiempos de transformación que nos tocó, por fortuna, vivir. En esa dualidad de perspectivas seguir del lado correcto de la historia es nuestro compromiso.

    Les recomiendo estas fuentes consultadas.

  • Las Mañaneras o la política como asunto de todos

    Las Mañaneras o la política como asunto de todos

    Saliendo al paso nuevamente a sus detractores quienes le auguraban poco “aguante” para mantener la cotidiana costumbre de salir a informar al pueblo de lunes a viernes a partir de las 7 de la mañana, el pasado viernes 20 de mayo del año en curso el presidente López Obrador cumplió 871 conferencias matutinas.

    La práctica que ya realizaba estando al frente de la jefatura de Gobierno, del entonces Distrito Federal -diciembre de 2000 a junio de 2005- la recobró con mayor firmeza y decisión luego de asumir la presidencia de la República en el 2018, año en el que inauguró la posibilidad de hacer de la política nacional un bien público. Efectivamente, a decir de López Obrador la vida pública tiene que ser cada vez más pública y con ello promover una narrativa que acerque a la población a los acontecimientos que marcan la agenda de la Cuarta Transformación.

    Las conferencias matutinas, conocidas como Las Mañaneras, se han consolidado por ser el espacio idóneo mediante el cual el gobierno lópezobradorista informa y forma opinión acerca de la dinámica transformadora hoy imperante en México. Diariamente se reafirma la importancia otorgada a informar con transparencia y oportunidad, a fortalecer la llamada Revolución de las conciencias y a motivar la participación ciudadana esencial en el cambio de régimen.

    Este ejercicio cotidiano reúne a la población, que por miles sigue las transmisiones a través de medios públicos, privados y, también por supuesto, en las redes sociales, no solamente con el titular del Ejecutivo federal sino con prácticamente todos los integrantes del gabinete presidencial los cuales asisten para informar o ampliar detalles de temas tan diversos como lo es la problemática que en todos los ámbitos enfrenta, con desafíos contantes, el gobierno actual. Inclusive han participado gobernadores de todo el país, así como representantes empresariales, diplomáticos y otras figuras públicas nacionales e internacionales.

    En estos espacios se han llevado a cabo eventos y ceremonias, otrora exclusivos de la clase política, en asuntos tales como salud, energía, seguridad y delincuencia, economía, política exterior, obras y servicios públicos de los tres niveles de gobierno, cultura, y hasta se cuenta con una sección dedicada a las “mentiras de la semana”, promovidas desde el poder mediático.

    Hemos sido testigos de ocasiones en las que el presidente ha participado, aunque de manera virtual, en reuniones mundiales o regionales. La población ha tenido oportunidad de seguir de cerca la toma de decisiones presidenciales relacionadas con esos tópicos y otros más vinculados incluso con las posturas mexicanas adoptadas en materia de las relaciones bilaterales o multilaterales.

    Como sabemos, la dinámica que siguen estas conferencias inicia con la participación del primer mandatario y cuando se requiere intervienen también funcionarios de su equipo, o en el caso de visitas a los estados, el gobernador correspondiente. Tras la exposición institucional se da la palabra a representantes de medios de comunicación tradicionales o corporativos, públicos y alternativos. Con frecuencia los periodistas incluyen sus propios juicios de valor, o la posición editorial del medio que representan por lo que, más que preguntas, resultan en cuestionamientos tendenciosos que pretenden obtener “la nota” con alguna declaración de López Obrador de la que puedan sacar “raja política”.

    Sin embargo, el presidente responde a todos los planteamientos formulados haciendo gala de sus conocimientos históricos y casi siempre de reflexiones que resultan útiles para comprender sus posiciones y la perspectiva que aquellos le provocan. Por estas respuestas, e incluso por sus contenidos detallados, López Obrador es atacado por los opositores, quienes dedican amplios espacios en sus medios a denostar, manipular o simplemente mentir acerca de lo expuesto.

    Una crítica reiterada, que se suma a todas las que se han mantenido sobre las conferencias, es la relacionada con lo que consideran la violación a los derechos humanos y a las libertades de expresión y prensa, situación que según la oposición se expresa cuando el presidente pone en evidencia a medios, noticias y/o mensajes en redes sociales. Según los opositores el presidente “abusa de su autoridad” y “lincha” a los periodistas o medios que representan.

    Sin embargo, a decir del propio López Obrador lo que él hace es usar su derecho de réplica, al cual sin duda tiene derecho a no renunciar. A nuestro juicio su principal objetivo es contrarrestar los mensajes e informaciones canalizados por los medios empresariales de comunicación masiva, cuyos destinatarios o consumidores son miles o millones de mexicanos que no cuentan con opciones para informarse, por lo que resultan ser presa fácil de sus “noticias”.

    Frente a ello, el titular del Ejecutivo federal dedica tiempo en Las Mañaneras para elaborar un contra mensaje que confronta el predominio de las narrativas con las características antes expuestas. Aunque esta estrategia funciona cada vez mejor, en lo que a la mayoría de la población se refiere, el alud de informaciones y mensajes producido por más del 90 por ciento de los medios y sus líderes de opinión cumple su propósito manipulador entre las élites y sectores de la clase media urbana.

    Conviene recordar que estas conferencias no están dirigidas a los medios, a sus representantes, a los opinólogos e intelectuales orgánicos neoliberales, o a los sectores de poder sea este político o empresarial. La rendición de cuentas y la información que se da a conocer todas las mañanas, de lunes a viernes desde el salón Tesorería de Palacio Nacional, tiene un destinatario el ciudadano de a pie quien ha estado atado, preso, manipulado, y malinformado de la realidad que es de su incumbencia, a lo que tiene derecho, pero de lo que también se desprenden importantes obligaciones de participación y defensa de los fines de la Cuarta Transformación.

    Antes de concluir, les comparto una reflexión acerca del poder mediático, corporativo y elitista que se considera intocable y que acusa al gobierno de estar violentado sus derechos: “… Pero ¿quién critica al poder mediático? Es el único en nuestras sociedades que no tiene contrapoder. Luego, no es democrático. No estamos cuestionando la libertad de expresión; estamos diciendo que los medios de comunicación, en nombre de la libertad de expresión, no aceptan ningún tipo de crítica. ¿No la aceptan en nombre de la libertad de expresión o no la aceptan en nombre de la libertad de empresa? Este es el problema, porque ¿qué es lo que defienden? En general son empresas mediáticas que evidentemente no aceptan la crítica; si alguien critica la institución mediática, se ve inmediatamente excluida del juego democrático. En Moraes, Dènis; Ramonet, Ignacio; Serrano, Pascual. Medios, poder y contrapoder. De la concentración monopólica a la democratización de la información. Editorial Biblos. Buenos Aires, 2013.

    No dejemos de seguir día con día a las conferencias presidenciales. Hay disponibles repeticiones, resúmenes, análisis, versiones estenográficas, en fin, una variedad de presentaciones por si no podemos seguirlas en vivo. Recordemos que desde esos espacios se marca la agenda nacional y desconectarnos de ellos, es hacerlo del acontecer nacional en estos momentos, por demás históricos, que afortunadamente nos tocó vivir.

  • El respeto al derecho ajeno

    El respeto al derecho ajeno

    Con el título de esta colaboración me permito invitar a los amables lectores se sirvan evocar varios temas, a decir verdad, por lo menos dos: la didáctica del discurso de AMLO, con frecuencia sostenida en la recuperación de la historia nacional, más allá de la historiografía que construyó el neoliberalismo, y la vigencia de los principios constitucionales en materia de política exterior cuya estatura moral patentiza el presidente con cada visita al exterior.

    El apotegma de Benito Juárez García, líder de la Segunda Transformación, nos aporta enseñanzas históricas en una de sus vertientes como lo fue la lucha de México ante la invasión extranjera y también contribuye a explicar los fundamentos de la tradición diplomática mexicana sustentada en los siete principios incorporados en el artículo 89 constitucional, mismos que debe observar el Ejecutivo de la Unión en las relaciones con el mundo.

    El vínculo indisoluble entre los principios de autodeterminación, no intervención, solución pacífica de controversias, proscripción del uso de la fuerza, igualdad jurídica de los Estados, cooperación internacional y la lucha por la paz, y la aplicación de la máxima juarista a las naciones en la sentencia del respeto al derecho del otro, subraya la consistencia entre ambos fundamentos que, correspondiendo a etapas diferentes de nuestro acontecer histórico, forman parte indisoluble de las memorables páginas escritas en defensa de la soberanía nacional.

    La simple narración de hechos, en el mejor de los casos relatada solo para ser memorizada, en la que se convirtió la enseñanza de la historia nacional, se reelabora en el discurso con el que López Obrador se comunica con la diversidad de sus interlocutores, jefes de Estado y de gobierno, aunque su destinatario final es el mexicano de a pie, el ciudadano sencillo para el que héroes y personajes, hechos y fechas, han ido cobrando sentido dejando atrás lo que significaban aquellas estampas usadas para ilustrar trabajos escolares.

    El contenido de la comunicación que el presidente imprime con sus mandantes, en el diálogo que ha ido construyendo con ellos, sin duda se sustenta en la revaloración del conocimiento de nuestra historia, como una condición sine qua non en la llamada “revolución de las conciencias” y posiciona, en el inconsciente colectivo de los ciudadanos mexicanos, la soberanía nacional.

    El binomio entre el re-conocimiento de la historia y la defensa de nuestra soberanía se observa, cada vez con mayor nitidez, en los objetivos e intervenciones que durante las visitas de Estado u oficiales López Obrador ha llevado a cabo a lo largo de poco más de tres años de gobierno.

    Asistimos a la recuperación de la otrora digna política exterior de nuestro país. Con la Cuarta Transformación se rescata la estatura moral ganada a pulso en el exterior antes de que el neoliberalismo hiciera del gobierno mexicano una simple comparsa del imperialismo. Los objetivos, mensajes, y logros de la gira por Centroamérica y el Caribe fortalece nuestro orgullo nacional, sin chovinismos como lo dijera AMLO.

    La pieza del discurso, en ocasión de la visita a Cuba, cobra mayor relevancia por el sustento histórico que subraya la fraternidad de milenios la cual ha mantenido unidos a los dos países. AMLO se remontó a la colonia y al paso obligado que fue Cuba para todos los viajantes europeos. La amistad de ambos países fue desgranada poco a poco y paso a paso desde los mayas en Cuba, las expediciones españolas que partieron de la isla a la zona continental, las raíces cubanas en zonas de nuestro país se advierten en el bello puerto de Veracruz y la referencia a los dos gobernadores de origen cubano en Tabasco y el yerno cubano y principal confidente del presidente Juárez, el reconocimiento mexicano a la independencia cubana y a su presidente Carlos Manuel de Céspedes, levantado en armas y padre de la patria cubana.

    Bastas fueron las referencias a José Martí y su productiva vida literaria en México, entre 1875 y 1877, escribió ensayo, poesía y el guion de su obra de teatro cuyo título nuestro presidente ha hecho famoso y descubrimos que lleva como título precisamente “Amor con amor se paga”. Y también incluyó a la figura del revolucionario mexicano, Catarino Erasmo Garza Rodríguez, quien convoca a tomar las armas contra de Porfirio Díaz, 18 años antes de Francisco I. Madero. Catarino vive sus últimos años en Matina, Costa Rica, pero antes estuvo escondido en La Habana.

    Subraya que el embajador cubano trata de salvar la vida de Madero, les ofrece asilo a los detenidos y hasta pasa la noche con ellos. Reconocido es que el suelo cubano sirvió de asilo tanto a porfiristas como a maderistas revolucionarios. El paso de Fidel y su grupo de “barbudos” expedicionarios del Granma, por Veracruz. Sin duda la postura en contra del bloqueo estadounidense a Cuba que el presidente mexicano ha reiterado en diversas oportunidades, calificada como una perversa estrategia, invitando a asumir que estos tiempos deben ser de diálogo, y de unidad del continente manteniendo siempre el respeto a las soberanías.

    López Obrador concluye insistiendo en que el presidente Biden no excluya a ningún país de América en la Cumbre del mes próximo a celebrarse en Los Ángeles, California, y que las autoridades de cada país decidan libremente si asisten o no a dicho encuentro, pero “que nadie excluya a nadie”.

    Y a propósito de la relación con Estados Unidos, no puedo dejar de referirme en este artículo al discurso que López Obrador dirigió, frente a Donald Trump en la Casa Blanca, el 8 de julio del 2020, en el que refiere algunos aspectos de la historia los vínculos bilaterales y sin rubor señala que existen diferencias entre ambos países, enfatizando en que los mexicanos son trabajadores y se ganan la vida de manera honrada, en clara alusión a la imagen que Trump promovía de nuestros connacionales:

    Ciertamente, en la historia de nuestras relaciones, hemos tenido desencuentros y hay agravios que todavía no se olvidan, pero también hemos podido establecer acuerdos tácitos o explícitos de cooperación y de convivencia. (…) la historia, la geopolítica, la vecindad y las circunstancias económicas de ambas naciones han impulsado de manera natural un proceso de migración de mexicanas y mexicanos hacia Estados Unidos y se ha conformado, aquí, una comunidad de cerca de 38 millones de personas, incluyendo a los hijos de padres mexicanos. Se trata de una comunidad de gente buena y trabajadora que vino a ganarse la vida de manera honrada y que mucho ha aportado al desarrollo de esta gran nación.

    Finalmente, recordemos lo expuesto el 24 de julio de 2021 cuando el presidente López Obrador encabezó en el Castillo de Chapultepec la ceremonia conmemorativa del 238 aniversario del nacimiento del libertador Simón Bolívar, frente a los asistentes de 32 países a la 31ava. Reunión de Cancilleres de Estados Latinoamericanos y Caribeños, que ese día se inauguró. En ese contexto insistió en la lucha por la integridad de los pueblos de nuestra América, frente a la rememoración que hizo del surgimiento de la “Doctrina Monroe” bajo la consigna de América para los Americanos que ha servido de marco a constantes ocupaciones, desembarcos, anexiones y la pérdida de la mitad del territorio mexicano en aquel fatídico 1848.

    Es por lo que esa ocasión resultó propicia para que AMLO reafirmara que tenemos poderosas razones para hacer valer nuestra soberanía y demostrar con argumentos, sin balandronadas, que no somos un protectorado, una colonia o su patio trasero, en clara referencia a Estados Unidos.

    Estos breves argumentos sirvan para demostrar porque nuestro actual mandatario ha recuperado para México el liderazgo y la influencia perdida por el entreguismo neoliberal de los gobiernos que reverenciaban el poder de las transnacionales y sus representantes gubernamentales, postura que por cierto nunca mereció respeto alguno de los representantes extranjeros y contrapartes de los vendepatrias prianistas.

  • El derecho a la salud

    El derecho a la salud

    El tema de la salud es uno de los grandes pendientes para millones de mexicanos. Por ello creo necesario dedicar más tiempo a obtener información acerca de lo que está haciendo la Cuarta Transformación, destinándole recursos sin límite para enfrentar las lastimeras condiciones en las que el modelo neoliberal privatizador dejó a los servicios de salud pública, pero además del presupuesto se tiene un plan y las estrategias necesarias para enfrentar ese enorme reto.

    Dada la problemática encontrada y para impedir o por lo menos hacer más complejo que gobiernos de viejo cuño, pretendan una contrarreforma, resulta relevante la reforma constitucional al artículo 4º, cuyo decreto se publicó en el Diario Oficial de la Federación, el 8 de mayo del 2020, justo el día de ayer hace dos años. En el texto se garantiza el derecho a la protección de la salud y en su aplicación se incluyen atención médica, análisis, cirugías y medicamentos gratuitos.

    Sin embargo, la pandemia del Covid-19 pospuso el inicio del Plan de Salud Integral que, en una de las primeras conferencias matutinas, presentaba López Obrador en diciembre de 2018. Tras haber superado la emergencia el mandatario anunció, el martes 3 de mayo, que el gobierno federal cuenta con el presupuesto necesario para implementar el programa IMSS Bienestar y con ello reiniciar la estrategia de fortalecimiento del sector salud.

    De acuerdo con la información presentada en La Mañanera del martes pasado, en una primera etapa el conjunto de acciones a realizar comprende diagnósticos en hospitales y unidades de salud en 15 estados: Baja California Sur, Campeche, Colima, Ciudad de México, Durango, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí, Sonora, Sinaloa, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas. Para este año la meta del programa es incorporar al modelo a 347 hospitales de segundo nivel y 7 mil 33 unidades de primer nivel con 46 mil 43 trabajadores de la salud.

    Los resultados que arrojó ese diagnóstico, de campo y no de escritorio, se clasifican en tres ámbitos. Equipos: en las unidades, clínicas y hospitales, desde refrigeradores para vacunas, esterilizadores de vapor, y estetoscopios y fonodetectores de latidos fetales, hasta equipos más sofisticados como ultrasonógrafos, unidades oftalmológicas y de anestesia; infraestructura: relacionada con mejoramiento, remodelación, ampliación y fortalecimiento de hospitales y por último el que representa el mayor reto está relacionado con el personal: ámbito en el que se requieren más de 33 mil trabajadores de la salud en todas las categorías, solo por citar algunas médicas (os), generales y especialistas, enfermeras (os), auxiliares, camilleros, etc.

    En Nayarit ya se cumplió el primer mes de haber iniciado la operación del sistema estatal, recordemos al propio presidente cuando desde Tepic informó que sería pionera en la aplicación del modelo de salud integral. En este arranque del programa destaca la dignificación de 125 unidades a través de cambios de mobiliario e instalaciones hidráulicas, impermeabilizaciones y bardas perimetrales. Las acciones de mejoramiento incluyen: ampliación de farmacias en cinco hospitales, habilitación de cuatro hospitales para espacios de residencias médicas, rehabilitación de almacenes de insumos de tres hospitales, adecuación de quirófanos en tres hospitales y en el Hospital Civil se habilitó el área del tomógrafo.

    El tema de la disponibilidad del personal de salud es otro pilar fundamental. A la fecha se han contratado 602 trabajadores de la salud en primer y segundo nivel. Por otra parte, una necesidad urgente de atender ha sido resuelta ya que, gracias al Sistema de Abasto Institucional, se cuenta ya con el 90.32 por ciento de recetas surtidas en los hospitales de la entidad.

    El énfasis del Director del IMSS, Zoé Robledo, habla por sí mismo: “La misión es que hagamos realidad el derecho pleno a la salud, a la atención médica, a los medicamentos gratuitos para quienes no tienen seguridad social y que se haga realidad el artículo 4° de la Constitución y es este modelo IMSS Bienestar el que ha sido elegido para esta implementación”.

    El presidente López Obrador indicó que todos los martes se irá informando, en “Las mañaneras”, del avance y la incorporación de otros estados. Aseguró que su gobierno se ha propuesto tener el sistema de salud funcionando de manera óptima para el primer trimestre del año próximo. “… en cuatro o cinco meses ya vamos a poder decir están todos los médicos, se atiende a los pacientes en todos los turnos, en fines de semana, no faltan las medicinas, ya (estamos) al 100”.

    Dirigiéndose a los representantes de los medios y a los miles de seguidores de las conferencias el presidente se comprometió a “… transparentar aquí con ustedes para que, si lo que estamos informando no corresponde a la realidad, se denuncie o nos ayuden todos a dar seguimiento al proceso hasta que entre todos podamos lograr levantar el sistema de salud público, gratuito, no sólo el cuadro básico de medicamentos, todas las medicinas, todos los análisis clínicos, todas las intervenciones, porque se robaban hasta el dinero de los medicamentos, políticos corruptos que tenían ese negocio, apoyados por medios de información y periodistas famosos…” 

    Finalmente, y a propósito de la corrupción imperante durante los gobiernos neoliberales, estimados lectores les recomiendo el libro de Raúl Olmos: El saqueo corporativo. Publicado por Editorial Aguilar.

    De ese texto les comparto las siguientes líneas:

    Los servicios de salud colapsaron. Cada hora 23 mexicanos fallecían a causa de la epidemia… el presupuesto disponible era insuficiente para atender a tantos enfermos, que al año sumaban millones… El escenario era devastador y ya afectaba a uno de cada tres niños y a siete de cada diez adultos. Los decesos sumaban 200 mil al año… grandes corporaciones intentaban, por todos los medios legales, frenar el acceso a ese remedio simple y barato. Aplicar medidas preventivas les implicaba pérdidas millonarias. Privilegiaban sus utilidades por encima de la salud pública… La epidemia de la que hablo no es la del covid-19. Es una más funesta y de mayor expansión que fue declarada cuatro años antes… el motivo de esa alerta fue la inquietante expansión del sobrepeso y la obesidad que, en ese momento, aquejaba a 70% de la población adulta y que, junto con enfermedades asociadas como la diabetes e insuficiencia renal, absorbía a 34% del gasto público… Así que cuando en marzo de 2020 se declaró la contingencia sanitaria por el covid-19, confluyeron en México dos epidemias… Las dos epidemias se han agravado con una peste que, desde hace décadas, ha infestado todos los ámbitos de nuestra sociedad: la de la corrupción. La complicidad del poder político y económico facilitó el saqueo de fondos públicos. Los sobrecostos, que se han vuelto costumbre en prácticamente todos los contratos gubernamentales, han encubierto con frecuencia el pago de propinas, dádivas o sobornos a funcionarios. Y cada vez que un gobierno paga productos a precios inflados, quita dinero a servicios públicos, como la atención a la salud.

    Demos seguimiento a la puesta en práctica de las estrategias de este plan integral a través de las conferencias de los Martes de la Salud.

    Para elaborar este comentario se consultó información de la conferencia matutina del 3 de mayo de 2022, cuyo enlace se incluye: https://lopezobrador.org.mx/2022/05/03/version-estenografica-de-la-conferencia-de-prensa-matutina-del-presidente-andres-manuel-lopez-obrador-729/

  • Vamos por la Reforma Democrática

    Vamos por la Reforma Democrática

    El presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso la iniciativa de reforma constitucional en material electoral, segunda de las tres que el Ejecutivo nacional tiene previstas someter, durante lo que resta de su gobierno, a la consideración del cuerpo legislativo nacional. La primera de ellas fue la que, en materia eléctrica, fuera rechazada el pasado 17 de abril por el bloque de los partidos de oposición a la 4T, y la siguiente será la que propone que la Guardia Nacional pase a formar parte integrante de la Secretaría de la Defensa Nacional. 

    Efectivamente, en la conferencia matutina del jueves 28 de abril, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, tomó la palabra para informar que, siguiendo instrucciones del presidente, un grupo de trabajo, encabezado por la coordinadora jurídica, e integrado por Horacio Duarte, titular de la Agencia Nacional de Aduanas, Pablo Gómez Álvarez, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera y otros compañeros habían “… terminado la propuesta de una iniciativa de reforma democrática…” enfatizando: “… Más que una reforma electoral, esta iniciativa de reforma que hoy se presenta a la Cámara de Diputados responde al añejo reclamo de los ciudadanos del pueblo de México.

    Los alcances de esta iniciativa de reforma constitucional coinciden plenamente con la definición de una reforma democrática ya que, como se explica en la exposición de motivos, el objeto de esta es adecuar el sistema electoral a las transformaciones políticas que ha vivido nuestro país en los últimos años. Principalmente busca facilitar el ejercicio de los mecanismos de participación ciudadana en la vida pública, ampliar la representatividad, garantizar la pluralidad en los poderes públicos así como fortalecer a los órganos administrativo y jurisdiccional en materia electoral salvaguardando el equilibrio de poder y la imparcialidad en las contiendas electorales.

    La reforma a más de veinte artículos de nuestra Constitución, propone diez objetivos. Para efectos de este comentario me permito referirme brevemente a algunos de ellos, los cuales incluyo por separado en los dos párrafos siguientes. Primero los relativos al sistema electoral propiamente dicho y los que refieren cambios propuestos en la elección de representantes populares y al financiamiento público de los partidos políticos, posteriormente. 

    En materia electoral centran su atención en: dotar al país de un sistema electoral que brinde seguridad, respeto al voto, honradez y legalidad; erigir autoridades administrativas y jurisdiccionales honestas e imparciales que se mantengan fuera de la lucha por el poder; conformar un solo mecanismo electoral nacional con instituciones administrativas y jurídicas únicas, bajo el principio de la austeridad republicana; elegir mediante voto secreto, directo y universal a las autoridades administrativas y jurisdiccionales, por postulación de candidaturas a cargo de los poderes de la Unión.

    En cuanto a la elección de los representantes populares y a los recursos otorgados a los partidos: elegir a ambas cámaras del Congreso de la Unión mediante votación en cada una de las entidades federativas, con el uso del método de listas postuladas por los partidos y candidaturas independientes; eliminar 200 diputados federales y 32 senadores para dejar en 300 el número de integrantes de la Cámara de Diputados y en 96 el del Senado; limitar el financiamiento de los partidos políticos solamente para gastos de campaña electoral y suprimir el llamado financiamiento ordinario que se les otorga mensualmente. La letra en negrilla no aparece en el original.

    Llamo a su amable atención, estimados lectores, el papel central que esta iniciativa le otorga a la participación ciudadana ya que desplaza al sistema electoral vigente, basado en el predominio de las instituciones electorales y de la “partidocracia”, puesto que la ciudadanía participará directamente en la postulación y elección de las autoridades electorales, así como de todos sus representantes en los órganos legislativos y la propuesta disminución del gasto público originada en la extinción de los organismos electorales estatales y en la reducción de los recursos destinados al sostenimiento de los partidos políticos.

    A decir de diversos especialistas esta reforma constitucional podría correr la misma suerte que la votada el domingo 17 de abril, en la que Morena y sus aliados no lograron la mayoría de dos tercios para ser aprobada. En este caso me permito proponerles dos reflexiones finales. Una relacionada con las alternativas que estaría considerando el titular del poder Ejecutivo federal y la otra acerca de las razones que en el fondo tendrían los partidos aglutinados en torno a Claudio X. González para votar en contra.

    Se dice que el presidente López Obrador, en el caso de la reforma en materia electoral, no cuenta con un “plan b” como sí lo tuvo para la relativa al tema eléctrico. Sin embargo, creo que la perspectiva presidencial va más allá puesto que de no ser aprobada, la movilización ciudadana se fortalecerá en torno a lo que con toda seguridad debe hacer en el proceso legislativo del 2024. Es decir, de nuevo impulsar con su decidida participación el triunfo de la o el candidato presidencial de la 4T y la obtención, en el Congreso de la Unión, de la mayoría calificada con los representantes del movimiento Obradorista, asegurando así la aprobación de las reformas necesarias en la consolidación del régimen de la Cuarta Transformación. 

    Los opositores, por su parte, esgrimirán para justificar su rechazo a la iniciativa razones vinculadas con la “defensa de la institucionalidad democrática”, representada según ellos por el Instituto Nacional Electoral. Sin embargo, además de los recortes presupuestales que se propone aplicar a los partidos políticos, la eliminación de las instancias electorales estatales y en general las propuestas vinculadas con el acotamiento de la hegemonía de las burocracias electoral y partidista, lo que en verdad les aterra es enfrentar a una ciudadanía organizada, empoderada y sobre todo consciente a la que esos poderes ya no podrán manipular tan fácilmente como lo hicieran durante décadas. 

    En esta perspectiva es que la reforma democrática cobra su verdadero y trascendente sentido.

    Les dejo el enlace para que puedan leer el texto completo de la iniciativa presidencial. http://gaceta.diputados.gob.mx/PDF/65/2022/abr/20220428-XI.pdf?fbclid=IwAR2iGdEAI7YSJVYwirnEAWvp5S1fNDpG3bdvLFr6KgFGvq8ITCr7KxvuOdo