“Yo no sabía nada”, dijo uno de los peores enemigos de México: Felipe Calderón. La putrefacción que durante su sexenio generó y que ahora lo está alcanzando, fue destapada con los juicios que se llevan a cabo en EU vs García Luna, brazo derecho de Calderón en el ámbito de seguridad.
Queda en evidencia que Calderón fue un delincuente quien junto a un equipo por él escogido, lograron agigantar al narco; lo envalentonaron, lo proveyeron de todo tipo de recursos; humanos, armamentístico, económico, militar, policial, etc. El expresidente, su familia y sus amigos, debido a sus innumerables transas, acumularon inmensas fortunas.
Ciertamente es un hombre minúsculo no solo de principios y estatura, sino también de inteligencia, pero bien que supo robar al erario y fortalecer el Narco-Estado. Nadie acepta en sus cuentas millones de pesos sin saber de dónde llegaron. Inventó empresas, asociaciones para poder desviar los recursos y poderlos blanquear. Insoslayable el grave daño social, económico y político que dejó al país.
¡Nos cree ingenuos! Su comentario atenta contra nuestra inteligencia. Incluso hay panistas que ya comenzaron a deslindarse de él; no porque sean honorables e inmaculados; pero nadie quiere salir “embarrado” de la suciedad que el expresidente atesora.
“Calderon es responsable políticamente y posiblemente en lo judicial; por que él lo puso y es inverosímil que tuviera desconocido el comportamiento de su secretario; y si no lo supo, pues fue un idiota”, dijo enfático un líder panista.
Ahora que este hombre pueril y sin decoro, teme ser tocado por la justicia, decidió pedir a España la autorización de residencia y trabajo; como profesional altamente calificado. Dicha autorización fue apadrinada por Aznar otro expresidente indeseable que múltiples veces se ensució las manos con contratos leoninos incluso afectando a México.
“Tengo las manos limpias” alardeaba con desvergüenza, siendo candidato a la presidencia, por el PAN, el año que cuajaban las élites del poder político y del poder económico un burdo fraude contra Andrés Manuel Lopez Obrador; candidato amado por el pueblo y a quien dolosamente le perpetraron una perniciosa campaña, llamándolo “Un peligro para México”.
Calderón arrebató la presidencia también con la comparsa del Instituto Electoral; iniciando una era oscura y sangrienta. El de las “manos limpias” y conciencia negra llegó a la silla del águila, con una trayectoria gris, habiendo ganado solo en una ocasión un cargo de elección popular, pues ni su estado, Michoacán, votó por él cuando decidió contender por la gubernatura.
Participó en varias legislaturas locales y federales, pero las diputaciones que obtuvo no fueron por voto popular, sino por asignación. Mientras intentaba infructuosamente ganar escaños de gobierno; sus cargos dentro de la dirigencia del PAN fueron en ascenso, hasta llegar a dirigir su partido a nivel nacional.
Fue en esa escalada de puestos internos del PAN, donde pulió su vocación embustera; conoció y puso en práctica las artimañas, las concertacesiones y todos los artilugios utilizados en la política inmoral.
Un hombre conveniente para los que ostentan el poder en el mundo; por su pensamiento fascista, por su carencia de principios y la facilidad para ser manipulado. Capaz de pactar alianzas con actores sociales enemigos del pueblo.
La revista CONTRALÍNEA y su clara visión de justicia, ha sido un referente en la búsqueda por el esclarecimiento de los hechos de corrupción de Felipe Calderón, apuntalando el deseo y sentir del pueblo mexicano de ver condenado a uno de los artífices mas abominables del narcotráfico, su perjudicial guerra y sus lacerantes secuelas.
Calderón enfrenta una denuncia en Corte Penal Internacional, debido a que sus políticas públicas costaron miles de vidas humanas, miles de desapariciones forzadas, y otras graves acciones contra el pueblo.
El expresidente y su esposa se empantanaron en una serie de millonarias estafas financieras contra el erario publico, una vez que él dejó la presidencia, amistades, familiares, Ong’s, asociaciones, recibieron jugosas sumas de dinero como supuestos donativos, ademas de operar un sinnúmero de transacciones que acrecentaron las fortunas de los Calderón. La campaña de la señora Zavala, también estuvo sumergida en un foso de suciedad financiera.
Hoy el clan Calderón trabaja por salir impunes de todos los daños físicos, sociales y financieros que causaron. Intentan obtener aliados a través de los legisladores panistas; sus redes, familiares y amistades. Pero muchos se van desmarcando de ellos.
¿Y el pueblo? ¡El pueblo está encabronado! Ciertamente, desde hace muchos años los presidentes actuaban con indolencia contra la gente; mientras uno dejaba la economía “en alfileres”, otro “se los quitaba”. No aportaron, pero… ¡Ah cómo saquearon!
Todos unos vendepatrias, enemigos de la nación. Pero estamos conscientes que a partir de Calderón, el país se ensangrentó, el narco se empoderó y el fascismo recrudeció.
Delincuentes como los expresidentes merecen juicio y rotundo castigo. Calderón no merece vivir gastando nuestro dinero ni paseando por el mundo como cualquier hombre libre y honesto.
¡Que regrese lo robado! El pueblo lo exige… México lo merece… ¡Cárcel a Calderón!
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
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